Cocodrilo feliz
hablador
Pues nada, que mi nieta (la mas joven de las dos que tengo) el otro día me vino a pedir si tenía una tienda... y le dejé una que usé una sola vez. Ahora ha vuelto pero ya directamente a pedirme la caravana. Se la dejé, claro. Ella trabaja aquí y su pareja en otra ciudad gallega a 150 kms, así que se ven los fines de semana. Se conocieron en un ralli: Ella va a hacer fotografías y él anda corriendo... y tiene una plataforma para llevar el coche de competición, así que vinieron y les di media docena de consejos y se fueron. Según la caravana desaparecía al salir de casa, la nostalgia me empezó a abrumar a borbotones...
A la edad que ellos tienen nosotros teníamos dos hijos, una pequeña tienda de campaña, una moto y unas ganas de comernos el mundo inenarrables. De dinero más bien justitos. Seguro que ya habíamos tenido más de un enfado. Y así 56 años. Si no hubiésemos tenido los dos hijos ahora no existirían los tres nietos... ni sus relaciones. Ahora todo es distinto: como dice Kahn_tauri, lo mío es mío y lo de ella es de ella, y esta nieta ya no está casada ni está soltera ni tiene novio... tiene una relación, se ven los fines de semana y a vivir que son dos días.
Hace muchos años el periódico local me envió con otros compañeros a recorrer Europa para entrevistar a emigrantes españoles. Echamos de menos el ruido que hacen los niños en los parques (tras la Guerra había pocos niños, nos dijeron) y nos asombró la libertad que las mujeres solteras e independientes disfrutaban para, con la misma madurez de ir al trabajo todos los días, disponer de los fines de semana para hacer de su capa un sayo... como los hombres.
La sociedad evoluciona. A los viejos nos agobia la nostalgia. Algo es algo: Si me agobia es que estoy vivo.
A la edad que ellos tienen nosotros teníamos dos hijos, una pequeña tienda de campaña, una moto y unas ganas de comernos el mundo inenarrables. De dinero más bien justitos. Seguro que ya habíamos tenido más de un enfado. Y así 56 años. Si no hubiésemos tenido los dos hijos ahora no existirían los tres nietos... ni sus relaciones. Ahora todo es distinto: como dice Kahn_tauri, lo mío es mío y lo de ella es de ella, y esta nieta ya no está casada ni está soltera ni tiene novio... tiene una relación, se ven los fines de semana y a vivir que son dos días.
Hace muchos años el periódico local me envió con otros compañeros a recorrer Europa para entrevistar a emigrantes españoles. Echamos de menos el ruido que hacen los niños en los parques (tras la Guerra había pocos niños, nos dijeron) y nos asombró la libertad que las mujeres solteras e independientes disfrutaban para, con la misma madurez de ir al trabajo todos los días, disponer de los fines de semana para hacer de su capa un sayo... como los hombres.
La sociedad evoluciona. A los viejos nos agobia la nostalgia. Algo es algo: Si me agobia es que estoy vivo.