A mi me encanta el pop en la decoración, es alegre e informal... Lástima que no me den rienda suelta...
Todos los objetos que nombras son muy famosos y me gustan mucho, aunque cuando veo una casa con el clásico cartel de la lata de tomate y los cuatro detalles prototipo en un ambiente minimalista, me gusta menos que por ejemplo, el rótulo luminoso de la Barbie del baño de Alaska o sus muñecos-robots...
Te muestro un rinconcito de mi cocina con un pequeño toque pop, o al menos a mi me lo parece... Es la zona de almacenaje de bebidas que no caben en la nevera. Cuando consumimos las frías las reponemos de esa balda y cuando se van agotando subimos más del trastero. No siempre están esas botellas, ahora hay cinco o seis tipos de cervezas... Alhambras, de las que más...
El servilletero de Trina naranja, hasta que una de mis compañeras no lo consiguió para mí, en el bar donde suelen desayunar, no paró... Ni te imaginas la ilusión que me hizo... Parece ridículo, pero me encanta. Y las Coca-colas (y la Pepsi) están traidas de los distintos paises a donde he viajado... El tomate es un reloj de cocina que me regaló mi suegra. La muñequita me la trajo mi amiga de su viaje a Brasil...