... pues mejor así. Las pinturas son muy tóxicas, sobremanera las plásticas, y aún más las que vienen con antihongos.
Viviendo en casa, pintar no es buena idea.
Para pintar la casa, lo mejor es justo antes de irse de vacaciones, y justo antes de volver darle un buen ventilado.
... Yo intentaré enseñarle a leer al crío, que le cuesta bastante.
Ya, es verdad.
Yo lo del crío y la lectura lo tengo superado, es aficionado a leer y tenemos biblioteca con alrededor de 1000 libros en casa, ahora que ya se lanza a leer sólo, porque ya controla las mayúsculas y minúsculas, pues se tira un buen rato tirado por cualquier rincón leyendo (ayer se cogió las 20000 leguas de viaje submarino de Verne que le regalamos por reyes, uno de depredadores marinos y un manual de los marines espaciales de Warhammer de su padre y ahí estuvo más de una hora y media sin decir ni mu).
Otra cosa que le gusta mucho es bañarse, así que a falta de bañera, en casa tenemos un balde (de esos típicos negros de jardinería) que metemos en la ducha, lo llenamos y ahí se mete, con sus playmobil, monta unas buenas historias y cuando se empieza a enfriar mucho el agua, lo sacamos, pijama y se tira en nuestra cama un ratito con unos dibujos en la tele (Netflix, Prime...) y después se coge el cajón de lego y se puede tirar otras dos horas montando historias.
Algún juego de mesa (Monopoly, Carcassonne, Laberinto...).
Le pones un documental y ni se nueve hasta que acaba.
Y ya después pues algo de rutina normal, algunas sumas del cole, práctica de piano, algo de ejercicio...
La suerte que tenemos nosotros es que nuestro hijo es un niño muy casero y fácil de entretener.
Pero claro, llevamos pocos días sin salir, quizás en dos semanas no sea tan fácil.
Ah, y hacemos videollamada con sus amigos (videollamada con wasap a 4) y con las abuelas, primas y tíos.