Efectivamente, las declaraciones de algunos políticos dan verguenza ajena.
Pero por desgracia o mala leche, hay gente que parece empeñada en intentar hacer creer a los demás que los independentistas pensamos todos igual, como borregos (cree el ladrón que son todos de su condición). Saben de sobras que obviamente no es así, pero no pueden o quieren disimular su rabia y odio. Como si yo dijera contínuamente que todos los andaluces que votan al PSOE son ladrones, chorizos, corruptos y vagos, a sabiendas que habrá gente en este hilo que se sentirá atacada y dolida. Seria exactamente lo mismo.
En los meses que llevo aquí, me he dado cuenta de que algunos foreros generalizan para no insultarme directamente, ya que saben que soy independentista, y creen que con lo que dicen me voy a sentir aludido. Sé que en ocasiones hay mucha ironia o sentido del humor, o es su manera de expresarse (con el tiempo nos vamos conociendo) pero en otras hay mucha mala leche y llevan una intención clara de ataque personal. Estas últimas ni las contesto.
Soy catalán y actitudes así las conozco de toda la vida. Aquí en Tarragona, mismo, no he tenido que salir de casa. Desde el típico "Hablame en cristiano" hasta el tópico "
que ejto ej ejpaññña coññño". Claro, también hay casos al contrario, pero de esos ya os ocupais vosotros contínuamente.
Obviamente, y que quede claro, son excepciones. Tengo amigos de "ocho apellidos catalanes" que votan al PP y no quieren ni oir hablar de independencia. Y extremeños, andaluces, madrileños, aragoneses, valencianos, etc, que han votado ERC o JxCat y se quieren largar de España porque creen que Catalunya seria un país más justo y próspero. Equivocados o no. Hasta ahora unos y otros lo hemos llevado muy bien, como siempre. Pero solo conocemos esa convivencia, esas experiencias y sensaciones los catalanes.
Por eso me divierte, preocupa e indigna a partes iguales que algunos foreros que ni son catalanes ni han vivido aquí nunca, que no tienen pajotera idea de la complejidad de la sociedad catalana, nos quieran dar lecciones de que es un buen o un mal catalán. Y a mi ningún madrileño, andaluz, extremeño, valenciano, castellano, gallego o patagón me va a dar lecciones de catalanidad.
Sin acritud. De verdad. Saludos.