¿QUÉ PROPONEMOS PARA COMENZAR A RESCATAR NUESTRO PAÍS?
Con todas sus insuficiencias, las personas que vivimos en el territorio valenciano tenemos reconocido un espacio de autogobierno que se articula institucionalmente en la Generalitat, que ha asumido la prestación de buena parte de los servicios ciudadanos sin disponer, sin embargo, de los recursos económicos estables adecuados. El Estado central no nos reconoce la capacidad para recaudar y distribuir el dinero que nos hace falta, y a la vez nos hace unas aportaciones insuficientes. El desfase entre las grandes obligaciones presupuestarias asumidas estatutariamente y la escasa recaudación propia ha provocado el surgimiento de la deuda histórica que el Estado central mantiene con el PV, que los expertos nombrados por las Cortes Valencianas evaluaron en 2013 en la cifra de 13.500 millones de euros. Pero el Estado ni reconoce esta deuda ni la paga, razón por la cual tenemos que pedirle préstamos mediante el Fondo de Liquidez Autonómico y pasamos nosotros a ser deudores por cantidades crecientes. Esta situación deudora también hunde nuestra credibilidad ante la Unión Europea, porque ahoga a los gobernantes actuales y hace que estén obligados a desviar los fondos estructurales hacia otras finalidades. Si esta espiral no se detiene, el PV pasará a ser la Grecia del estado español.
CONCIERTO ECONÓMICO RESPONSABLE
Compromís pide, como base para el desarrollo de una acción de gobierno justa, solidaria y enfocada a las personas, EL CONCIERTO ECONÓMICO RESPONSABLE, que supone la recaudación y gestión por la Generalitat de todos los tributos que se generan, y la negociación posterior con el Estado para transferirle el excedente para solidaridad y para compensar los servicios generales que nos presta. Esto comporta:
1.La asunción de la capacidad normativa plena sobre los tributos, sin más limitaciones que las directrices comunes que se establezcan con el Estado y la Unión Europea.
2.La creación de una Agencia Tributaria propia por parte de la Generalitat.
3.La adecuación de la capacidad financiera propia al coste real de las competencias asumidas, y la garantía de que las inversiones territoriales serán proporcionales a nuestro volumen de población.
4.La negociación transparente con el Estado para transferirle los excedentes para cubrir los servicios generales que presta y contribuir a la solidaridad con otros territorios.
5.La bilateralidad Estado-Generalitat como mecanismo de negociación y revisión del Concierto siempre que haga falta.
