Lo que yo he podido observar es que generalmente hacen un uso mucho más intenso de la parcela, disponen de más superficies cubiertas y acumulan más enseres. Eso da la sensación de chabolismo, pero no necesariamente y no siempre. Además, hacen un uso más intenso de los servicios del camping que los itinerantes (piscinas, instalaciones recreativas, etc...).
Su actitud suele ser más desenvuelta dentro del camping: conocen a muchos otros campistas fijos y al personal del camping. A veces eso puede dar la sensación de arrogancia, superioridad o mala educación.
Suelen ser más cuidadosos y velan más por las infraestructuras del camping que los itinerantes.
Tienen costumbres y horarios diferentes a los itinerantes, y eso puede generar conflictos por el tema de ruidos.
Todo lo dicho es lógico, y se basa en un concepto radicalmente diferente del campismo. Es un campismo que se basa en permanecer en el camping (ya conocen los alrededores y por tanto no tienen necesidad de salir a "explorar" ni a hacer turismo. Eso hace que vivan como en casa, se acuestan más tarde, madrugan menos.
En definitiva, los fijos y los itinerantes realizan actividades diferentes ocupando elementos similares y compartiendo espacios muy próximos.
La clave, como casi siempre, esta en la dirección del camping: sectorizando y distanciando convenientemente unos y otros, los problemas se minimizan. Mezclando, sin orden ni concierto, conviertes el camping en un polvorín. Y no es que sean mejores ni peores por el hecho de ser fijos o itinerantes, sencillamente es que van al camping a hacer cosas diferentes.