Buenas tardes cafeteros, entre unos días y lo dejé, pero por motivos de trabajo, ahora me leo un poco y me pongo otra vez al día, ya veo que algunos se han ido de finde, ! que suerte ! y otros ya con las vacaciones en mente, !mas suerte todavía!.
También leo algo de los exámenes del cole, puff, menudo , parece que volvemos a sacarnos otra vez los estudios, yo creo que antes no dábamos tanta guerra a los padres.
Ostras, esto m'ha llegao... recuerdo recién llegado a Valencia (8 años, pero pudo pasar a los 9-10) preguntarle a mi madre un día sobre unos problemas, y decirme que ella no sabía resolverlos, que bastante si llegaba a saber dividir y mal (nada de decimales), a ver si mi padre sabía ayudarme pero que estaría más o menos igual... recuerdo que lloré un montón...
y aún hoy me cuesta no hacerlo al acordarme, lloré por que mi padres no sabían dividir...
lejos de enfadarse, me explicó como se las apañaba, pero lo cierto es que no recuerdo haberles preguntado nunca más nada, o lo he olvidado, pero esto no.
Y como no quiero ponerme triste un chiste que quizá venga al tema (sin violencia)
-Hijo, ¿cuantos son dos y dos?
El niño, contento y saltarin, cuenta mentalmente
-¡Cuatro!
¡Zas! el padre le suelta una bofetada
-Te he preguntado cuantos son dos y dos
El niño, dudando, vuelve a contar.
-Cuatro
¡Zas! otra bofetada.
-¡¡Que te he preguntado cuantos son dos y cuatro!!
Sollozando el niño vuelve a contar y dudando...
-¿cuatro?
¡Zas! otra bofetada.
-¡¡Ves a ver a la profesora y como no sean cuatro, te vas a enterar!!
Lo mío no fue así ni mucho menos, pero se preocuparon mucho por que aprendiera "algo".