Espero que todos hayáis regresado tan contentos como nosotros después de las vacaciones. Como mis capacidades literarias son nulas/inexistentes, voy a ser breve:
Lisboa: Estuvimos en el Lisboa Camping. El camping nos pareció estupendo, tanto en las instalaciones como en el mantenimiento. Llegamos el domingo 29 a medio día, por lo que no sufrimos las famosas colas en recepción. Autobús a 100 mts de la puerta hasta el centro de la ciudad. Como ya había estado en otra ocasión, la ciudad no me sorprendió, no así los alrededores, especialmente Sintra.
Porto: Nos quedamos en el Orbitur Madalena. La verdad es que me decepcionó un poco este camping, con unas buenas instalaciones pero mal mantenidas, especialmente la limpieza (aunque en esto creo que la mayor parte de culpa es de los acampados). Muchos fijos (o largas estancias con enanitos de jardín) y parte de los bloques sanitarios cerrados. La sorpresa agradable fue la ciudad de Porto y las bodegas.
Santiago de Compostela: Camping As Cancelas. Un buen camping, con muchos holandeses y franceses. Fue la base de operaciones para la zona de Santiago y A Coruña. La única pega es que la parcela asignada estaba en la zona alta a la izquierda del camping, frente al cuartel de la Guardia Civil, y allí es donde da la vuelta el viento, con lo que los cinco días que pasamos tuvimos que echarnos piedrecitas en los bolsillos para no salir volando.
Sarria: Camping Vila de Sarria. Después de la cantidad de "bulla" de gente que había en Santiago, llegar a este camping, conocido por la webcampada galega que se hizo allí, fue toda una gozada. Camping tranquilo, limpio con unas excelentes instalaciones en un bosque de robles (carballos dicen los gallegos). El restaurante y el bar una maravilla: una buena carta y de lunes a viernes menú por 8 euros con una calidad increíble y una cantidad excesiva. Además, la amabilidad de la familia que lo lleva, con Carlos a la cabeza que facilita tu estancia hasta límites difíciles de creer: fui testigo de como ante una señora que no tenía tabaco (y el camping de momento no tiene autorización para su venta) Carlos fue hasta el pueblo a comprarle un par de paquetes.
El camping se encuentra junto al camino de Santiago, por lo que ves a los peregrinos provenientes de Samos desfilando por la puerta (algunos de ellos se alojan en el propio camping). Desde aquí, visitamos Sarria (el centro está a 10-15 min andando) Samos, Monforte de Lemos y Lugo (que eran las ideas que teníamos) y el Castro de Villadonga, y los cañones del Sil en catamarán, a sugerencia de Carlos. En el bar del camping, en una estantería en lugar preferente se encuentra un porrón con el pitorro "tuneado" de manera que en lugar de un chorrito tiene que soltar un caño. Dicho porrón lo olvidó el Padre Fran en la webcampada galega.
Los seis días que pasamos en este camping se nos pasaron volando y nos metieron el gusanillo de hacer el camino de Santiago (al menos desde Sarria que ya permite ganarse la Compostela). Veremos si en un par de años la cosa está madura.
Desde Sarria nos fuimos una semanita a Sanabria (no de camping) y desde aquí a Cáceres, que no la conocíamos. Nos encanto la ciudad, Trujillo y el camping Ciudad de Cáceres, con ese detalle de un servicio propio para cada parcela.
Después de cuatro semanas volvimos a casa con algún kilo de más y algún euro de menos y muy, muy contentos.
Un abrazo a todos
Paco
Lisboa: Estuvimos en el Lisboa Camping. El camping nos pareció estupendo, tanto en las instalaciones como en el mantenimiento. Llegamos el domingo 29 a medio día, por lo que no sufrimos las famosas colas en recepción. Autobús a 100 mts de la puerta hasta el centro de la ciudad. Como ya había estado en otra ocasión, la ciudad no me sorprendió, no así los alrededores, especialmente Sintra.
Porto: Nos quedamos en el Orbitur Madalena. La verdad es que me decepcionó un poco este camping, con unas buenas instalaciones pero mal mantenidas, especialmente la limpieza (aunque en esto creo que la mayor parte de culpa es de los acampados). Muchos fijos (o largas estancias con enanitos de jardín) y parte de los bloques sanitarios cerrados. La sorpresa agradable fue la ciudad de Porto y las bodegas.
Santiago de Compostela: Camping As Cancelas. Un buen camping, con muchos holandeses y franceses. Fue la base de operaciones para la zona de Santiago y A Coruña. La única pega es que la parcela asignada estaba en la zona alta a la izquierda del camping, frente al cuartel de la Guardia Civil, y allí es donde da la vuelta el viento, con lo que los cinco días que pasamos tuvimos que echarnos piedrecitas en los bolsillos para no salir volando.
Sarria: Camping Vila de Sarria. Después de la cantidad de "bulla" de gente que había en Santiago, llegar a este camping, conocido por la webcampada galega que se hizo allí, fue toda una gozada. Camping tranquilo, limpio con unas excelentes instalaciones en un bosque de robles (carballos dicen los gallegos). El restaurante y el bar una maravilla: una buena carta y de lunes a viernes menú por 8 euros con una calidad increíble y una cantidad excesiva. Además, la amabilidad de la familia que lo lleva, con Carlos a la cabeza que facilita tu estancia hasta límites difíciles de creer: fui testigo de como ante una señora que no tenía tabaco (y el camping de momento no tiene autorización para su venta) Carlos fue hasta el pueblo a comprarle un par de paquetes.
El camping se encuentra junto al camino de Santiago, por lo que ves a los peregrinos provenientes de Samos desfilando por la puerta (algunos de ellos se alojan en el propio camping). Desde aquí, visitamos Sarria (el centro está a 10-15 min andando) Samos, Monforte de Lemos y Lugo (que eran las ideas que teníamos) y el Castro de Villadonga, y los cañones del Sil en catamarán, a sugerencia de Carlos. En el bar del camping, en una estantería en lugar preferente se encuentra un porrón con el pitorro "tuneado" de manera que en lugar de un chorrito tiene que soltar un caño. Dicho porrón lo olvidó el Padre Fran en la webcampada galega.
Los seis días que pasamos en este camping se nos pasaron volando y nos metieron el gusanillo de hacer el camino de Santiago (al menos desde Sarria que ya permite ganarse la Compostela). Veremos si en un par de años la cosa está madura.
Desde Sarria nos fuimos una semanita a Sanabria (no de camping) y desde aquí a Cáceres, que no la conocíamos. Nos encanto la ciudad, Trujillo y el camping Ciudad de Cáceres, con ese detalle de un servicio propio para cada parcela.
Después de cuatro semanas volvimos a casa con algún kilo de más y algún euro de menos y muy, muy contentos.
Un abrazo a todos
Paco