Sin duda es lo único y peor de ese camping.... todo blanquito por la arenilla esa....Yo, en mi segunda visita al Marjal de Guardamar de Segura, no pude más con el polvo de ese camping y decidí comprar el suelo que vendía Julio en el súper del camping. Es una pasada: duro, permeable y se barre y friega fácilmente. Me lo recomendaron los compañeros fijos de allí y me indicaron que venían de fuera única y exclusivamente a comprarlo, y la verdad es que merece la pena.
En Valladolid había mirado malla antihierbas y es mucho más endeble y frágil, no tiene nada que ver.