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Sandakan
Raúl - Sandakan
Eva mira a que la aplicación este protegida cuando la cierras y no se desconecte para ahorrar batería, eso me ha pasado a mi con alguna aplicación y luego no me llegan las notificaciones o correos
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JUASUA
Isu takasiyana
Preciosa lección de vida recibida ayer en el hospital por un grupo de peques.
Sala de espera de traumatología. 5 niños con escayolas varias en piernas y brazos.
-¡Mira, mamá, un enano! - gritó una niña. De inmediato los otros 4 niños se giraron para verlo.
-Calla, hija, no hables tan alto, y no le mires así, que le puedes molestar - la madre de la niña no sabía dónde meterse.
-No pasa nada, puedes mirar y hablar y preguntar todo lo que quieras - contestó el chico.
Estas "palabras mágicas" atrajeron a los 5 niños a su alrededor como un imán. Y comenzó un diálogo que recuerdo más o menos así (con varios intentos de los padres de cortar una conversación que nos parecía incómoda, pero que al chico no pareció incomodarle en ningún momento).
-¿Cómo te llamas?
-Me llamo Luis.
-¿Qué te ha pasado?
-Que me han operado de la rodilla.
-No, que qué te ha pasado para que seas enano.
-Nací así. Tengo acondroplasia.
-¿Qué es eso?
-Pues es una característica de mi cuerpo. Dejaron de crecerme los brazos y las piernas, y me quedé así de bajito.
-¿Pero por qué?
-Pues porque así funciona mi cuerpo. Otras personas crecen mucho, otras engordan mucho, otras parecen un palillo, otras nacen sin un brazo, o sin una pierna, otras se quedan calvas muy pronto, y yo dejé de crecer muy pronto.
-¿Y te gusta ser así?
-Ni me gusta ni me disgusta. Soy así, y ya está. ¿A ti te gusta ser rubia? ¿Y a ti tener tus orejas y tu nariz?
-Pero ¿la gente no se ríe de ti?
-Pues a veces sí.
-¿Y no te molesta?
-De pequeño sí me molestaba. Ahora ya no. Hasta me alegro de que se rían.
-¿Por qué?
-Porque si alguien se ríe significa que está alegre, y eso es bueno. Y a mí la risa de la gente no me hace daño. Me haría daño que me pegaran, o que me tiraran al suelo. Pero que se rían no me hace daño. Además se ríen solo un rato, porque enseguida se marchan. ¡No voy a enfadarme por un ratito de diversión! Así que cuando alguien se ríe de mi, yo me río con él, le digo que me alegro de verle feliz, le deseo un buen día y sigo a lo mío. Su risa no cambia mis planes.
-¿Y si pudieras crecer crecerías?
-Pues mira, supongo que sí, porque siendo tan bajito hay muchas cosas que no puedo hacer. No puedo montarme en algunas montañas rusas. No llego a los armarios y siempre tengo que andar subiéndome a las sillas. A veces no veo bien los espectáculos. Creo que siendo más alto mi vida sería más cómoda. Así que sí, si pudiera crecería. Pero como no puedo, lo que hago es buscarme trucos para que mi vida sea más fácil.
-¿Y tienes amigos?
-¡Anda, claro! Y tengo novia.
-¿Y es enana como tú?
-No. Es alta.
-¿Pero a las chicas altas les puede gustar un chico enano?
-A todo el mundo le puede gustar todo el mundo, por más alto, bajo, gordo, delgado, guapo o feo que sea. Eso depende de a qué le des más valor, si a la persona por fuera o a la persona por dentro.
-Pues a mí no me gustaría un chico enano.
-Porque le estás dando más valor a la persona por fuera que por dentro. Y eso no es malo. ¿Pero sabes qué? Que si solo te fijas en las personas por fuera, puedes perderte el conocer a gente tan estupenda como yo.
-¿Y a ti te gusta tu novia por fuera o por dentro?
-Las dos cosas. Es que lo ideal para ser novios es que te gusten las dos cosas. Que te gusten las dos cosas a la vez, o que te guste primero por fuera y luego por dentro, o que te guste primero por dentro y luego por fuera.
-¿Y a tu novia le gustan las 2 cosas?
-Pues creo que sí. Y te voy a contar un secreto. Yo sé que por fuera puedo no gustar demasiado a la gente. Así que me esforcé mucho por hacerme muy guapo por dentro. Y he descubierto que si le gustas a la gente por dentro, muchas veces terminas gustándoles también por fuera.
-¿Eso te pasa a ti?
-¡Sí! A mis novias, que he tenido varias, primero les gusté por dentro. Y terminé gustándoles por fuera.
-¿Y a los amigos?
-Oye, que gustar o no gustar por fuera puede ser importante con las novias, pero tus amigos pueden ser los más feos del mundo y da igual. Eso sí, los amigos o gustan por dentro o no pueden ser amigos.
-¿Y si se ríen de ti?
-Pues si se ríen al principio, pero luego les gusto y ellos a mi también, entonces sí pueden terminar siendo mis amigos. Pero si siguen riéndose de mi y me hacen sentir mal ¿para qué los quiero como amigos?
-¿Pero tú qué haces con tus amigos?
-Lo mismo que tú con los tuyos, supongo. Voy al cine, juego a las cartas, veo el fútbol, me divierto. Vale, no puedo jugar al baloncesto. Pero seguro que tú no puedes entrar en los parques de bolas dentro de unos años, y yo sí. ¿No podemos ser amigos por eso?
-Pero no podrás conducir un coche.
-Pues que conduzcan mis amigos. Pero yo no estoy con mis amigos porque puedan conducir. Estoy con ellos porque estamos a gusto juntos, nos reímos y lo pasamos bien, y nos ayudamos unos a otros. ¿Tú no estás con tus amigos por eso?
-Bueno, sí...
-Pues entonces. Da igual cómo seas por fuera, todo el mundo puede tener amigos y ser feliz. Es cuestión de buscar a los que quieran ser tus amigos de verdad. Siempre hay. O yo siempre he encontrado.
-Luis F. G. , consulta 4.
-Ese soy yo. Bueno, chicos, hasta luego.
Gracias, Luis, de todo corazón, por la enorme lección que diste a esos niños y sobre todo a sus padres.
Leído en la red.
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Sala de espera de traumatología. 5 niños con escayolas varias en piernas y brazos.
-¡Mira, mamá, un enano! - gritó una niña. De inmediato los otros 4 niños se giraron para verlo.
-Calla, hija, no hables tan alto, y no le mires así, que le puedes molestar - la madre de la niña no sabía dónde meterse.
-No pasa nada, puedes mirar y hablar y preguntar todo lo que quieras - contestó el chico.
Estas "palabras mágicas" atrajeron a los 5 niños a su alrededor como un imán. Y comenzó un diálogo que recuerdo más o menos así (con varios intentos de los padres de cortar una conversación que nos parecía incómoda, pero que al chico no pareció incomodarle en ningún momento).
-¿Cómo te llamas?
-Me llamo Luis.
-¿Qué te ha pasado?
-Que me han operado de la rodilla.
-No, que qué te ha pasado para que seas enano.
-Nací así. Tengo acondroplasia.
-¿Qué es eso?
-Pues es una característica de mi cuerpo. Dejaron de crecerme los brazos y las piernas, y me quedé así de bajito.
-¿Pero por qué?
-Pues porque así funciona mi cuerpo. Otras personas crecen mucho, otras engordan mucho, otras parecen un palillo, otras nacen sin un brazo, o sin una pierna, otras se quedan calvas muy pronto, y yo dejé de crecer muy pronto.
-¿Y te gusta ser así?
-Ni me gusta ni me disgusta. Soy así, y ya está. ¿A ti te gusta ser rubia? ¿Y a ti tener tus orejas y tu nariz?
-Pero ¿la gente no se ríe de ti?
-Pues a veces sí.
-¿Y no te molesta?
-De pequeño sí me molestaba. Ahora ya no. Hasta me alegro de que se rían.
-¿Por qué?
-Porque si alguien se ríe significa que está alegre, y eso es bueno. Y a mí la risa de la gente no me hace daño. Me haría daño que me pegaran, o que me tiraran al suelo. Pero que se rían no me hace daño. Además se ríen solo un rato, porque enseguida se marchan. ¡No voy a enfadarme por un ratito de diversión! Así que cuando alguien se ríe de mi, yo me río con él, le digo que me alegro de verle feliz, le deseo un buen día y sigo a lo mío. Su risa no cambia mis planes.
-¿Y si pudieras crecer crecerías?
-Pues mira, supongo que sí, porque siendo tan bajito hay muchas cosas que no puedo hacer. No puedo montarme en algunas montañas rusas. No llego a los armarios y siempre tengo que andar subiéndome a las sillas. A veces no veo bien los espectáculos. Creo que siendo más alto mi vida sería más cómoda. Así que sí, si pudiera crecería. Pero como no puedo, lo que hago es buscarme trucos para que mi vida sea más fácil.
-¿Y tienes amigos?
-¡Anda, claro! Y tengo novia.
-¿Y es enana como tú?
-No. Es alta.
-¿Pero a las chicas altas les puede gustar un chico enano?
-A todo el mundo le puede gustar todo el mundo, por más alto, bajo, gordo, delgado, guapo o feo que sea. Eso depende de a qué le des más valor, si a la persona por fuera o a la persona por dentro.
-Pues a mí no me gustaría un chico enano.
-Porque le estás dando más valor a la persona por fuera que por dentro. Y eso no es malo. ¿Pero sabes qué? Que si solo te fijas en las personas por fuera, puedes perderte el conocer a gente tan estupenda como yo.
-¿Y a ti te gusta tu novia por fuera o por dentro?
-Las dos cosas. Es que lo ideal para ser novios es que te gusten las dos cosas. Que te gusten las dos cosas a la vez, o que te guste primero por fuera y luego por dentro, o que te guste primero por dentro y luego por fuera.
-¿Y a tu novia le gustan las 2 cosas?
-Pues creo que sí. Y te voy a contar un secreto. Yo sé que por fuera puedo no gustar demasiado a la gente. Así que me esforcé mucho por hacerme muy guapo por dentro. Y he descubierto que si le gustas a la gente por dentro, muchas veces terminas gustándoles también por fuera.
-¿Eso te pasa a ti?
-¡Sí! A mis novias, que he tenido varias, primero les gusté por dentro. Y terminé gustándoles por fuera.
-¿Y a los amigos?
-Oye, que gustar o no gustar por fuera puede ser importante con las novias, pero tus amigos pueden ser los más feos del mundo y da igual. Eso sí, los amigos o gustan por dentro o no pueden ser amigos.
-¿Y si se ríen de ti?
-Pues si se ríen al principio, pero luego les gusto y ellos a mi también, entonces sí pueden terminar siendo mis amigos. Pero si siguen riéndose de mi y me hacen sentir mal ¿para qué los quiero como amigos?
-¿Pero tú qué haces con tus amigos?
-Lo mismo que tú con los tuyos, supongo. Voy al cine, juego a las cartas, veo el fútbol, me divierto. Vale, no puedo jugar al baloncesto. Pero seguro que tú no puedes entrar en los parques de bolas dentro de unos años, y yo sí. ¿No podemos ser amigos por eso?
-Pero no podrás conducir un coche.
-Pues que conduzcan mis amigos. Pero yo no estoy con mis amigos porque puedan conducir. Estoy con ellos porque estamos a gusto juntos, nos reímos y lo pasamos bien, y nos ayudamos unos a otros. ¿Tú no estás con tus amigos por eso?
-Bueno, sí...
-Pues entonces. Da igual cómo seas por fuera, todo el mundo puede tener amigos y ser feliz. Es cuestión de buscar a los que quieran ser tus amigos de verdad. Siempre hay. O yo siempre he encontrado.
-Luis F. G. , consulta 4.
-Ese soy yo. Bueno, chicos, hasta luego.
Gracias, Luis, de todo corazón, por la enorme lección que diste a esos niños y sobre todo a sus padres.
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Carlos
Ơη ךђе Ŗοαď Дgαıη
Esa cría era más repelente que la de Catalana Occidente [emoji1] [emoji1]
JUASUA
Isu takasiyana
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