Gracias a todos... veo que incluso he "resucitado" a alguno de los megaveteranos del foro que hace años que no decían ni pío (¿verdad, "Sevilla"?). Pues nada... que os agradezco vuestros buenos deseos y me gustaría que todos llegaseis a ser octogenarios, eso sí, con algún achaque que otro pero con la "azotea" despejada que es lo sustancial. Y barruntando soluciones a problemas inexistentes como me está pasando a mi últimamente: Pongo en venta la caravana porque estoy comprobando que no la disfruto, ya que salgo sólo a algunas acampadas de club y a alguna "quedada", y, a veces, me da pereza enganchar para dos o tres días... y voy de alquiler de "bungalow"; y como resulta que vivo en medio de un monte en un "bungalow", cuando estoy desplazado echo de menos todo lo que tengo en casa... jejeje. Por eso me parece más práctico deshacerme de la caravana y cuando quiero salir alquilar una "camper" o una AC pequeña. En resumen: busco soluciones donde no hay problemas, para mantener la ilusión de que "me fijo metas" y además, ya no está Ella para cuestionar mis manías.
¡Ah!: No hay camino de vuelta. El pasado no vuelve, no se recupera. Y como no es posible detenerse ni a ver el panorama, la realidad es que sigues caminando, despacio, tan despacio como el tiempo que marca la Tierra dando vueltas alrededor del Sol. Minuto a minuto, aunque pienses que corres mucho porque vas en un BMW como los que nos presenta "Volusia", es inútil y por más que corras de un lado para otro, al final acabas siendo un "pollo sin cabeza" porque nunca serás dueño del tiempo, ni nunca alcanzarás el futuro. Eso me decía Ella: Piensa en el día de mañana, piensa en el futuro... Ahora que se ha ido de campin al "más allá" ¿dónde estoy: en el futuro o en el presente? ¿Y Ella? Por ejemplo: Si tengo 20.000 € en una cuenta en un banco ¿de qué me sirven? ¿Me sirven para el futuro? Es que, o disfruto de aquello que puedo comprar con ellos, ahora, o es como si no los tuviese. Y no digamos si alguien me convence para que compre sellos o invierta en "preferentes"...
Jejeje... en este momento, alguno de vosotros dirá: "Este tío se ha vuelto loco". No, no me he vuelto loco... es que me gusta enredar; hacer de abogado del Diablo... Expongo lo que, ahora mismo, siento como octogenario + 5. Esto, hace unos años era impensable: Que nadie pudiese exponer sus criterios y sus vivencias en un soporte mediático que no fuese un periódico o como mucho una emisora de radio, que, por otro lado, no estaban al alcance de todos. Ahora un viejo como yo puede exponer sus sentimientos e incluso sus deseos sentado delante de un ordenador... ¡y hasta dar consejos!
¡Qué barbaridad: nada menos que volver a disfrutar de una "California", por ejemplo!