Yo tengo la suerte de que me gustan los platos sencillos (que no simples, ya que son ecosistemas perfectos en sí mismos):
A) Tortilla de patatas, as de oros de la cocina española. Poco cuajada y con cebolla, por favor.
B) Pisto. No me importa si lleva tenedor, siempre que como dice el compañero, le pongan pan. Y si va acompañado de una morcillita, ya vamos, la perfección. De cebolla, eh.
C) Gazpachos Manchegos, que ni son gazpacho ni son de la Mancha. Un guisote lleno de fundamento y sabor a monte.
D) Cocido, no hay plato más completo, democrático y multicultural, y me da igual que sea Maragato, Montañés, Escudella catalana, Olla Aranesa, Puchero valenciano. Bueno, por costumbre prefiero el Castellano (mal llamado Madrileño), pero todos están buenísimos... o el cuscús marroquí que lleva la misma base.
E) un buen cordero/ternasco/cabrito asado... Casi más por las patatitas al horno que por la carne mmmm...
Por no añadir un caldero de arroz murciano, un buen cachopo asturiano, un botillo del Bierzo, un arròs negre... Uffff.