Este templo, debe su fundación a la Orden Militar del Hospital, cuya presencia en la zona, a lo largo de la Alta Edad Media fue muy importante.
Bajo la advocación de Santa María, se construyó este templo en la zona más alta de Caspe, junto a su viejo castillo. La obra fue promovida por la Orden Militar del Hospital de Jerusalén, la cual, poseía una importante encomienda en la localidad.
Las obras de la Colegiata, comenzaron en el siglo XIII, concluyendo en el siglo XV, por lo que en sus formas predomina el estilo gótico.
La iglesia tiene tres naves, de las cuales, la central es más ancha y más alta, toda ella cubierta por bóveda de crucería simple, que descarga sobre semicolumnas adosadas a gruesos pilares cuadrangulares. De hecho, las tres naves son la parte más antigua de la iglesia, ya que en el año 1515 se añadió el crucero y se le dotó otro testero.
En el exterior, destaca su portada occidental, realizada en 1412, con una abundante decoración en comparación con la sobriedad del interior. La portada está abocinada con arquivoltas apuntadas con capitales decorados escultóricamente. En las jambas, también hubo esculturas adosadas, pero se perdieron en la Guerra del 36, al igual que el parteluz o varios retablos e imaginería del interior.