"ARA" Y SUS AMIGOS...
Una "damita" con unos rizos preciosos que se llamaba "Ara ", pensó que Mérida (Extremadura) sería un lugar estupendo para vivir porque tenia a la vuelta de la esquina miles de hectáreas de naturaleza virgen y lo mas importante para ella, el río Guadiana y los embalses romanos de "Proserpina" y "Cornalvo".
Ella vivía en el centro, pero iba a jugar diariamente al parque de la Plaza de Toros y allí conoció a "Pachón", vaya un señor perro, todo cortesía y amabilidad, se veía que tenía "mucho mundo", pero era algo mayor para ella y aunque mantenían muy buena amistad, la cosa no llegó a cuajar ...
Un buen día, "Ara" fue a la clínica veterinaria "Arca de Noe" a comprarse un caprichito y mientras olfateaba los nuevos perfumes que habían traído, entró por la puerta, un chulazo muy guapetón. Fue un flechazo, comenzaron a temblarle las cuatro patas, sabía que sería el gran amor de su vida.
"Nate" sabia tratar muy bien a las damas y claro, que si que ojos mas bonitos tienes... que si me encantan tus ricitos... se fueron juntos a dar un paseo por la zona de "La Corchera" y la invitó a su casa, después de jugar un rato con una pelota de tenis, pasó lo que tenia que pasar y a los tres meses nacieron cinco cachorros preciosos, pero a excepción de "Coco" que se quedó a vivir con su padre, todos los cachorritos se marcharon fuera de Mérida.
Era domingo por la mañana y "Ara" fue a visitar a su hijo "Coco", se encontró cerca del bar "La Encina" a un perro muy elegante que se llamaba "Lanef" y comenzaron a charlar, poco a poco se hicieron muy buenos amigos. Quedaban para nadar juntos en el embalse de Proserpina a menudo, hasta que del roce surgió el cariño y cayó rendido ante tanta belleza, aunque casi lo consigue, "Ara" seguía siendo fiel a su peludo amado, y al sentirse rechazado, se marchó a vivir fuera.
Cuando se marcho "Lanef", justo una semana después, llego a Mérida un cachorro muy simpático llamado "Kiro", se hicieron muy amigos y quedaban todos los fines de semana para hacer deporte, también quedaban para pasar fines de semana en un cortijo que tenía "Ara" muy cerca de Mérida y allí se lo pasaban muy bien saltando y revolcándose en los charcos de barro que se formaban cuando a sus familias humanas se les olvidaba cerrar los grifos de las mangueras que usaban para regar los árboles.
A los pocos días quedaron para jugar en el río Guadiana , porque estaban esperando a una cachorrita nueva que había venido a vivir también a Mérida y que se llamaba "Cai", cuando llegó y comenzaron a jugar todos sacando ramas muy grandes del agua, pero vaya un carácter que tenia la pequeña, cuando alguno de sus nuevos amigos se acercaba para jugar con su rama, le gruñía y si tenia ocasión lanzaba una dentellada avisando de que no quería compartir la rama con nadie, todos la perdonaron porque era todavía una cachorrita con muy pocos meses.
Espero seguir escribiendo mas sobre los "Churrinos" de Mérida y tal vez consiga fotografias de todos para ponerlas en esta página (¿te quieres creer que no tengo ni una sola fotografía de "Ara" escaneada?) pues bueno, como se suele decir colorín colorado, esto no es un cuento y no se ha acabado. espero seguir añadiendo muchos mas "Churrinos" a esta "historia"
Podeis conocer esta raza en:
http://www.telefonica.net/web2/publio-carisio