El "problema eléctrico" de los campings no es más que una consecuencia de nuestro sistema eléctrico general. Y no tiene tanto que ver con "consumo" de luz como con la "potencia" que en un momento dado se le exige a las instalaciones. A todos nos ha pasado en casa que si ponemos muchos aparatos eléctricos a la vez "saltan los plomos" (modernamente, el magnetotérmico o diferencial), puesto que pedimos simultáneamente más energía a la instalación de la que esta puede proporcionar. Solucionar esto en un casa es bien sencillo: desconectas algunos de los aparatos conectados y asunto arreglado. Cuando acaba la lavadora, pongo el lavaplatos, y sigo tranquilamente con la tele, la luz y el horno encendido, por poner un ejemplo.
Pero ¿que ocurre en un camping? Muy sencillo, que no se puede "desconectar" a nadie. Y que cuando hace frío, todo el mundo tiene frío. ¿Y ahora qué hacemos?
Pasemos al plan b. Ampliamos la instalación eléctrica y contratamos más potencia. !Qué fácil!. Si no fuera porque la potencia (el llamado fijo, del recibo de la luz) tiene un coste. Si vamos a números concretos, de hoy, un camping que tenga, pongamos 130 parcelas y quiera dar 10A (2.200 W, suficiente para digamos un calefactor pequeño, o una plancha o un grill) a cada una necesitaría contratar 280 KW de potencia y eso le supone al camping pagar un fijo de 2.000 euros (+IVA) al mes. Aparte, la electricidad que los campistas consuman. Eso supone de "fijo" más de 15 euros por parcela y mes, a los que luego se añadirán el consumo que hagan.
Como resulta que la ocupación de los campings se concentra en la temporada de verano, festivos, puentes, fines de semana, etc... y que la mayor parte de los días están casi vacios, pero la potencia se paga si o si, todos lo meses (calculad este tema en los campings que solo abren dos meses o dos meses y medio al año!!) resulta que los establecimientos tienen que "hilar muy fino" en este tema si no quieren encontrarse con el problema de los cortes de luz. Y a la vista está que no todos los camping saben hacerlo...
Pd.- Uno de los grandes problemas es que la potencia contratada sólo se pude cambiar una vez al año, de modo que un camping de los "solo verano" está pagando un pastizal de luz sin encender una sola bombilla.