Cristóbal Montoro creía que su discurso para explicar la amnistía fiscal este miércoles en el Congreso iba a resultar convincente. Para ello tenía preparada una batería de cifras hasta ahora no conocidas. Lo que no supo medir es que esas cifras
destaparían otro escándalo, bajo la incredulidad de toda la oposición. La polémica viene de los
40.000 millones que, según Montoro,
han aflorado desde fuera de España con esta amnistía fiscal. El dato, que nadie esperaba, se ha contrapuesto con los
1.200 millones que, según el ministerio, ha recaudado el Estado con este proceso, si las cifras son ciertas. ¿Qué supone esto? Que mediante un cálculo, se comprueba que los
defraudadores han regularizado su dinero oculto a un tipo medio de un 3%, un interés mucho más barato de lo que estaba previsto. “
Acaba de destapar un escándalo”, se apresuró a decir el portavoz del PSOE en la comisión de Hacienda,
Pedro Saura, tras la intervención de Montoro. El resto de grupos políticos, uno tras otro, respaldaron las palabras del socialista.
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La sorpresa en la comisión se produce porque, de esta manera, el propio Ministerio de Hacienda
estaría incumpliendo la palabra de Rajoy cuando presentó la amnistía fiscal en el Congreso. El texto rezaba que
se podría regularizar el dinero oculto a cambio de abonar un 10% de lo defraudado. ¿Qué quiere decir esto? Que el Estado, con este principio,
debería haber recaudado 4.000 millones de euros, en vez de los 1.200 que Montoro ha reconocido. Eso es
menos de 1/3. "
El colmo ya era recortar lo que tenían que pagar los defraudadores, cuando cualquier trabajador tiene que pagar, al menos, un 15%", criticó
Rafael Larreina, de Amaiur
Encontronazo con el PSOE
La comparecencia de Montoro fue tensa, sobre todo con Saura y el PSOE, quien no se mordió la lengua al asegurar que el Gobierno pretendía que la amnistía fiscal regularizara situaciones presuntamente delictivas. “Ahora a posteriori buscan resolver la situación ante la opinión pública”, acusó.
El momento más tenso, no obstante, ha llegado cuando Saura ha hecho la pregunta bomba:
"¿Cobró usted sobres en B?". La cuestión encendió el ánimo de
Montoro, que llamó "ruin" al socialista y ha estallado contra el PSOE: "
Ensuciar, enfangar, ese es su estilo de oposición".
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