Hola, os habla por decirlo así una versión privada de fumador, esto es, os explico, hace ya no se cuantos años, dejé de fumar, sigo sin fumar cigarrillos, y no los puedo ni oler, muy de vez en cuando, enciendo uno doy dos caladas y lo tiro, coñ.. es que no me gusta.
Pero hace unos años, por trabajo me desplacé a Canarias y estuve allí un tiempo, y probé un puro de la Palma, que me gustó, ya que era algo diferente al cigarrillo.
Pues bien, desd entonces, y de forma privada, algunas noches, no me resito y me dejo llevar y me fumo un palmero número cinco con una buena copa de brandy y me quedo tan a gusto, eso si, lo tengo que hacer en mi despacho y con el balcón abierto, ya que reconozco que el tabaco debería estar prohibido, es un mal vicio.
Yo pienso, seguramente para justificarme, que ningún vicio en exceso es perjudicial, la verdad, que personalmente considero que no abuso, no tengo dependencia, ya que fumo cuando me da la gana, que no es todos los días, pero reconozco quesolo es una justificación.
Hay que felicitar a todos los que dejan de fumar por el esfuerzo que les supone, pero solo hay que pensar que se recuperan una serie de valores que con el tabaco se van deteriorando cada vez que se enciende un cigarrillo.
Saludos.