Atención, pregunta.
A lo largo de vuestras vidas caravaniles ¿Cuantas mesas se han descolgado? De esas que se han descolgado ¿Cuantas iban en modo salón y cuantas en modo cama?
Nosotros la llevamos bajada. Owockadoy lo ha explicado muy bien. Cuanto más lejos esté el peso del punto de apoyo, mayor momento de fuerza, tanto para girar hacia arriba y hacia abajo, como para clavarse en un lado de la pared y estirar del otro.
Pero sin tanta física, hago la prueba con la mano. Si la dejo en modo mesa, con un dedo la muevo, para arriba y luego cae ella sola, y también, aunque sea poco, de manera "circular", incluso si empujo (con el dedo) cerca de la pared, la desplazo hacia adelante o hacía atrás. Para mi eso es "ir suelta". En cambio si la pongo en modo cama, y la mía no lleva nada en la pared en esa posición, cuando le pongo los cojines encima, ya no la muevo, ni con el dedo, ni casi con la mano.
Cuando la hemos usado para comer en ruta, mientras alguien saca los bocadillos o va a mear, otro/a pone la mesa. Ni se notaba que había ido así o asá. Y al marcharnos lo mismo. Menos aún por que como digo, no hay nada que casar en la pared.
También pienso que cada uno es dueño de lo suyo.
Edito, que se me han olvidado los oscurecedores. Ahí discrepo de la mayoría. O mejor dicho, hago algo diferente: los llevamos bajados para que no entre el sol y que nadie mire en las paradas. Solo recuerdo que haya saltado uno en todos los viajes que hemos hecho.