Siempre han caído piedras en las catedrales.
Siempre han caído piedras en todos los acantilados del mundo.
Yo, de pequeño, jugaba muchos domingos con mis hermanos y amigos en las cuevas de las catedrales al escondite. Íbamos de "domingueros" , y apenas había gente, esa playa a nadie le interesaba, porque no tenía arena seca para plantar la toalla y pasar el día.
Caían piedras. Lo que le pasó a esa chica es un accidente fortuito, una mala jugada del destino.
El problema cuando haces de un espacio natural una atracción turística, es que se masifica, y la probabilidad de accidentes aumenta. La puñetera moda de los selfies también ayuda ... pero, que vamos a hacer ... ¿Vallar todos los acantilados del cantábrico?
¿Van a cerrar el Himalaya ... los Alpes?
Las administraciones, a lo que tienen un miedo atroz, es a las demandas por responsabilidad civil. Cerrar las catedrales es de locos.
Las catedrales tienen que estar abiertas, con carteles señalizando claramente el peligro (ya los hay), y allá cada uno con su responsabilidad, su prudencia, o falta de ella ... y con su suerte. Es la vida, y siempre ha sido así. Ni metidos en una burbuja de algodón nos vamos a librar de nuestro destino.
¿Dejan a la peña correr en sanfermines sin contratar ni siquiera un seguro privado ... y van a cerrar las catedrales?. Alucino
Un saludo
