Bueno, pues Yo de entrada, te pongo el anuncio oficial de turismo de la Bretaña que me encanta y os ayude a dar todavía más ganas si cabe para realizar este fantástico viaje que es ir y conocer la Bretaña francesa.
Además quería realizar un par de puntualizaciones de mi costilla
Iogui !
En
Locronan hay que visitar la tienda de libros que está en la plaza del pueblo. Es una tienda implantada en la segunda planta de una de las casas típicas repleta de libros de temática celta y es como un pequeño museo (no permiten hacer fotos). El pueblo está lleno de tiendas de dulces, flores, productos típicos y artesania local.
En Locronan tomamos una de las mejores crepes de huevo frito, jamón de york y queso (con trigo negro me parece) . No dejéis de tomar tampoco los dulces de allí pero con moderación (las galettes bretonnes). Hay que ir con moderación pues la mantequilla va a "cantidades industriales" . Tuvimos la suerte de caer un día que había un "marché aux étoiles" (supongo que es un mercado nocturno) que se hace en verano cada semana a partir de las 19h y en horarios no habituales para la mayoría de los franceses, el pueblo bullía de actividad. También pudimos ver algunos bailes típicos de la zona que amenizaban el mercado. Por lo tanto, es buena idea hacer coincidir la visita de Locronan con el mercado.
En
Dinan hay que visitar la
calle Jerzual y sus
murallas (me parece que la calle se llamaba así)
En la zona de
Pen-Hir tenéis el pequeño museo de la batalla del Atlántico (que no visitamos) pero al lado hay algunas zonas que son visitables libremente. Restos de una fortificación y también algunos búnquers del famoso Muro del Atlántico de la Segunda Guerra Mundial.
A la punta de Pen-Hir se puede llegar con el coche. No dejéis de visitar el otro lado de la punta de Pen-Hir donde está la playa de
Pen-Hat (creo que se llama así). Es una playa muy amplia que cambia su longitud con las mareas y que es un espacio protegido. En esta punta hay otro faro/baliza que no es visitable. Entre las dos puntas, están unas
ruinas , las de
la casa del poeta Saint Pol Roux que son absolutamente mágicas si tenéis la suerte de poder tener una puesta de sol allí. Muy al lado de las ruinas, hay un pequeño campo con
alineaciones de megalitos (está al lado de la área de autocaravanas de Camaret sûr Mer).
La
punta de Raz tambíén es un lugar impresionante, vale la pena verlo de dia, con lluvia, de noche con luna llena y sobretodo las puestas de sol. Hay un parking de pago para dejar el vehículo y un centro de interpretación. Al lado del centro de interpretación de la punta de Raz hay un complejo con bares y restaurantes bastante bien disimulado con el entorno y también todo sea dicho, según de que posición lo mires. Está lleno de caminos que se pueden hacer y también vale la pena para acercarse y ver el faro de la Vieille (creo que es ese). Vale la pena esperarse a que oscurezca y ver como se van encendiendo los faros de la zona y de las islas próximas, es un espectáculo digno de ver. Nosotros, como somos un pelín tardones, algunas veces llegamos a los sitios más allá de las 5 o 6 de la tarde pero quizás es en esos instantes dónde la "fauna autóctona" está en sus casas y si hace buen dia los paseos son más agradables y sin los agobios de que el lugar por el que pasas parezca las Ramblas de Barcelona a las 12 del mediodia del domingo.
Entre la punta de Raz y la
punta de Van hay una playa que también vale la pena visitar. En la punta de Van hay un parking donde dejar los vehículos y también un pequeño bar muy bien camuflado entre los pequeños montículos. Aquí la vegetación está mucho mejor preservada que en la zona de la punta de Raz. También hay muchos caminos y vale la pena acercarse a una pequeña iglesia que mira a la punta de raz.
En
Pont Aven nos dejamos cosas pues llegamos tarde pero hay un circuito con carteles indicativos de los cuadros de los pintores que se inspiraron con los paisajes. Es un precioso y delicioso paseo el que hay al lado del rio y los molinos de agua. Muy cerca de los molinos está el puerto de este rio que se queda vacio de vez en cuando siguiendo los ciclos de las mareas.
El cabo Fŕehel es impresionante también, multitud de rutas a pie o en bici. Se puede subir y visitar el faro pues está abierto al público y no es muy caro.Vale la pena dejarse caer de noche también y ver como se enciende el faro del cabo Fréhel y los del entorno.
Al lado del cabo Fréhel está el
fort La Latte y es un pelín caro, aunque ya puestos, vale la pena visitarlo.El dia que fuimos hacían una especie de representación medieval, con torneos, cetreria, mercados medievales y el personal vestido como si estuviesen en el medioevo. El problema era que había mucha gente y para hacer fotos es complicado. Yo aproveché los momentos en que la gente estaba con la demostración de cetrería para poder hacer fotos. Luego de que acabara es una riada de gente de aquí para allá.
El
Mount Saint Michel vale la pena verlo de día y de noche.Si se quiere ir de dia hay que levantarse pronto pues hay que hacer cola para visitar la "maravilla" y la cola de entrada es bastante larga. De noche las formas se transforman y el juego de luces y sombras es indescriptible. Además hay que contar que normalmente hay visita nocturna y está amenizada con diferentes músicos, juegos de luz y musica, ruidos, que amenizan las diferentes estancias de la abadia. El primer año que lo visitamos nocturnamente había poca gente pero me imagino que ha corrido la voz y ya hay considerablemente más gente.
Las calles empinadas y el paseo por las murallas es mejor hacerlos por la tarde pues hay menos gente.
Bueno, pues no se, si se me ocurre alguna cosa más ya la pondré. Que tengáis una muy buena visita y un fantástico viaje!