Veréis, la tienda es la solución fácil, pero no la ideal. Hay varias razones. Nuestro campismo es totalmente rutero. Cambiamos de base cada 2, 3 ó 4 días. Casi siempre viajamos por Europa y buscamos lugares de clima fresco -y frecuentes lluvias- que nos permitan estar todo el día en el exterior sin agotarnos por el calor. Ya sea en ciudades, museos, castillos, palacios, pueblecitos, montaña, parques de atracciones, actividades náuticas, etc.., estamos todo el día fuera y no regresamos hasta la tarde o la noche, según nos pille. Comemos fuera siempre y frecuentemente también cenamos fuera. Todo eso no quita que de vez en cuando no volvamos después de comer o nos quedemos una mañana en el camping, lavando ropas, haciendo limpieza, o en la piscina o en las pistas de tenis o baloncesto, pero son los menos. Buscamos campings tranquilos y pequeños (esos llenos de jubilados extranjeros en los que a las nueve de la noche oyes el cuco cantar y por la mañana te saludan en voz baja con una sonrisa). Con ese panorama, socializar es altamente complicado. Si sumamos que están en edad "electrónica", vienen (venimos) cansados de estar todo el día en marcha, las amistades además de escasas, son poco duraderas...
Así que entenderéis que con ese escenario la tienda nos crea varios problemas: de noche refresca bastante y nos suele llover (a veces usamos un calefactor en la caravana y el 80% de los días dormimos con un edredón finito), así que ninguno de los dos tiene ganas de salirse fuera... ¿lo sorteo? ¿a turnos? ¿los dos fuera? ¿los padres a dormir al suelo? JA!!. Otro "problema": el pis de madrugada. No me hace gracia que me abran la puerta de fuera y me entren de madrugada al wáter. Nos despiertan fijo (claro, diréis, !a mear a los baños del camping! pero...) Más inconvenientes: aunque no es lo habitual, a veces paramos a dormir en áreas de servicio... y montar allí la tienda !como que no!.
En definitiva, que no tengo ningún "voluntario" para ser el primero en abandonar el nido. Y lo que es peor, lo entiendo (que se está muy bien en la cama, calentito, sin lluvia, sin ruidos, ni luz, ni bichos, ni gatos nocturnos husmeadores, ni humedad que sube del suelo, ni condensación, con el wáter a mano y la botella de agua y en el calor del hogar junto a papá y mamá). No tengo ninguna duda en que con los años llegarán a la tienda, como todos hemos hecho. Pero creo que será haciendo otro tipo de campismo, con otras compañías y en otras latitudes.
Entiendo que en otras circunstancias la tienda es una solución muy válida, como puede serlo la habitación en el avancé. Pero es que yo lo más que monto es un toldo (el tarp del Deca, tengo dos que monto de varias formas y, calidad-precio son extraordinarios!).
Volviendo a la idea principal, que era el refuerzo de la litera, aprovecharé el fin de semana para hacerle unas fotos, y se entenderá mejor el problema.
Gracias por el croquis, a Freber, muy currado y por supuesto a Jorkinen por la foto. Me ayudará a buscar una solución, que seguro que la hay. De hecho, se me acaba de encender la bombillita, porque si en lugar de una pata, aumento la superficie del punto de apoyo, reparto el peso... !la tablilla que hace de tapa del arcón puede salir ilesa! Mañana haré las fotos y exploraré una solución para reforzarla.
Taer, Latumbadehuma, (y otros), yo no diría eso de lecciones de “comododismo”. Que una cosa es viajar y otra sufrir molestias innecesarias. El buen descanso es fundamental, y yo no conozco a nadie que pudiendo elegir, en su casa duerma sobre una esterilla... Es más, creo que la tienda de campaña es la culpable de que el camping no tenga más adeptos. Quien más quien menos, todos hemos pasado por ella y gustar, lo que se dice, gustar... Muchos de jóvenes prueban el camping en tienda y cuando pueden pagar un hostal, apartamento entre 15 o lo que sea, eligen el "lo que sea" antes que la tienda en el camping y por asociación de ideas, no quieren oír hablan de camping durante el resto de su vida. Y yo lo entiendo. La tienda es un refugio improvisado y portátil para aquellas situaciones en las que no hay nada mejor: zonas de montaña, rutas a pie, en bici, etc..., no hay otra cosa. Pero en cuanto haya otra alternativa... la cosa está clara: la otra.
Ah! se me olvidaba también expresar el agradecimiento a aquellos a los que les ha gustado el título o lo han defendido, claro que sí. Y a los que lo critican, pues sólo decirles que estaré encantado de aprender cómo hacerlo mejor. Seguro que tienen mucho que enseñar y no les faltarán las ganas de explicarnos algunas ideas, trucos o recursos literarios, para que todos aprendamos a titular de un modo más correcto.