JUASUA
Isu takasiyana
Organizan: Truman, Nasio y Juasua.
Fechas: del 2 al 11 de diciembre de 2022.
A la hora de inscribirse habrá que indicar las fechas que vais a venir, ejemplo Puente Constitución (del 2 o 3 al 6 de diciembre), Puente de la Inmaculada (del 7 o 8 al 11 de diciembre) o toda la webcampada (del 2 al 11 de diciembre).
Lugar: Camping Playa Tropicana de la localidad de Alcossebre (Castellón). Como de costumbre estaremos en las calles A, B y parte de la C.
Precio: 22,00 euros por instalación (2 personas, parcela, elemento de acampada, coche y luz 10A).
Niños y adultos extra a precio de tarifa.
Niños: De 1 a 10 años es de 5,00 euros.
Adultos: A partir de 10 años es de 6,00 euros.
Número de instalaciones: 20 parcelas.
Alojamiento en apartamentos o bungalows: Precio es de 20,00 euros por persona y noche (mínimo 2 personas). Los niños son gratis hasta los 4 años incluidos. La estancia mínima es de 2 noches.
Los apartamentos tienen T.V., cocina completa, microondas, frigorífico, tostadora, cafetera, ducha, WC, agua caliente, gas, electricidad, mantas, almohadas, sábanas y toallas.
Los bungalows tienen una terraza, aparcamiento de un coche, luz, gas, agua caliente, mantas, almohadas (pero no sábanas y toallas), una cocina completa con frigorífico, microondas, tostadora, cafetera, utensilios de cocina, ducha, WC y T.V. Su capacidad máxima es de 5 personas.
LISTADO ASISTENTES:
Nº | NICK | ADULTOS | NIÑOS | ELEMENTO ACAMPADA | FECHAS ASISTENCIA |
1 | JUASUA | 2 | CARAVANA | DEL 2 AL 11 | |
2 | TRUMAN | 2 | CARAVANA | DEL 2 AL 11 | |
3 | NASIO | 2 | CARAVANA | DEL 2 AL 11 | |
4 | KATI | 2 | CARAVANA | DEL 6 AL 11 | |
5 | SANDAKAN | 2 | CARAVANA | DEL 2 AL 6 | |
6 | JULI55 | 2 | AUTOCARAVANA | DEL 4 AL 9 | |
7 | PACOJO | 2 | CARAVANA | DEL 8 AL 11 | |
8 | CARLOS | 3 | CARAVANA | DEL 9 AL 11 | |
9 | WITO | 2 | AUTOCARAVANA | DEL 9 AL 11 | |
10 | NAIKOS71 | 3 | CARAVANA | DEL 9 AL 11 | |
11 | SARA | 2 | 2 | CARAVANA | DEL 9 AL 11 |
12 | DENIS HOPER | 2 | CAMPER | DEL 5 AL 11 |
PROGRAMACIÓN DE LA WEBCAMPADA
Como son tantos días la organización ha pensado que la programación sobre la marcha y día a día.
NORMAS DE LA WEBCAMPADA
- La organización se reserva el derecho de cambiar o modificar el programa de la Webcampada sin previo aviso.
- Durante el evento, se sacarán fotos que la organización podrá publicar en redes sociales.
- La participación en la presente Webcampada es libre y voluntaria pudiendo los asistentes participar libremente en las actividades que se organicen.
- La organización no se hace responsable de los daños o desperfectos sufridos u ocasionados a/y por los asistentes ni a/y sus instalaciones, tanto durante la Webcampada, como en los viajes de ida y vuelta de la misma. Asimismo, se pide la máxima colaboración de todos los participantes, para que todo transcurra dentro de los parámetros de normalidad.
- Cada elemento de acampada, una vez concluida la Webcampada, deberá de dejar su “parcela” limpia y sin restos de basura.
- Al inscribirse a la Webcampada, aceptáis estas normas.
Como algunos sabéis, la localidad de Alcossebre se extiende desde los montes de Irta y de Murs, hasta llegar al mar y sus playas. Hoy en día es uno de los lugares más acogedores de la Costa de Castellón.
Alcossebre cuenta con un clima y una orografía excelentes que permiten ofrecer una amplia oferta de actividades tanto deportivas y culturales durante todo el año. Además de disfrutar de sus playas podrás disfrutar haciendo bicicleta de montaña por sus rutas cicloturísticas, senderismo por la Sierra de Irta, buceando los fondos marinos, etc.
Visitar el casco histórico de Alcalà, el Castillo de Xivert o disfrutar de cualquiera de las Fiestas que jalonan el calendario, son algunas de las actividades de las que hacen a Alcalà-Alcossebre el lugar ideal.
Alcossebre ofrece unas playas de arena fina que forman parte, como sus calas de la Reserva Natural Marina d'Irta. Descubre el Parque Natural de la Sierra de Irta, la última sierra virgen en el Mediterráneo español. Con rutas planificadas para realizar en bicicleta o a pie. La reserva marina de Irta es una área perfecta para los amantes del submarinismo.
VISITAS DE INTERÉS TURÍSTICO
ERMITA DE SANTA LUCÍA Y SAN BENET
Mucho se ha hablado sobre el origen de la ermita de Santa Lucía y San Benet en Alcossebre, hay diferentes versiones que cuentan y que me gustaría compartir con vosotros.
¿Cuál es el origen de la ermita de Santa Lucía?
Cuenta la leyenda que un día de tormenta unos pescadores faenaban en alta mar, cuando les sorprendió una gran tempestad. Al verse en peligro y ante el temor de no poder soportar dicho temporal, rezaron a la Virgen haciéndole la promesa de que si los salvaba del naufragio y de morir ahogados, pudiendo volver sanos y salvos a casa, construirían una ermita para venerarla y dar las gracias por haber vuelto a nacer.
Buscarían el punto más alto de la costa, para que todo el mundo desde mar o tierra pudiese contemplar la ermita y poder visitarla. Después varias semanas buscando el lugar perfecto y merecedor de dicha construcción, el sitio elegido fue la montaña de San Benet a 312 m. sobre el nivel del mar, en Alcossebre.
Esta es la versión que cuentan los vecinos de Alcossebre sobre la ermita de Santa Lucía y que generación tras generación ha ido contándose de padres a hijos, de abuelos a nietos llegando así a nuestros días y que seguimos escuchando embobados en boca de ellos cada vez que nos la cuentan nuestros abuelos mientras estamos sentados en su regazo, para mi es la que vale ya que es la que siempre he oído contar y me quedo con ella…
Datos oficiales
La ermita de Santa Lucía, situada en la parte más meridional de la Sierra de Irta, es de estilo barroco valenciano y data de finales del siglo XVII. Una nave simple de vuelta de cañón y contrafuertes forman su estructura.
Posee una estructura semicircular adosada a la pared posterior de la ermita, de cuerpo cilíndrico y base de mampostería, cuyo funcionamiento puede datar de los siglos XV-XVI. El hecho que desde la cima se pueda ver el Prat de Cabanes, las islas Columbretes, el desierto de las Palmas, las Agujas de Santa Agueda y en contadas ocasiones si el clima lo permite podemos ver a lo lejos el Cabo de San Antonio, en Alicante, nos hace pensar que hubo una torre de vigía.
También podemos encontrar adosado un antiguo edificio que pudo ser un hostal con habitaciones para los peregrinos que llegaban de distintos puntos de la geografía para venerar a la virgen, establos para las caballerías y dos pozos en la plaza que abastecían de agua a la ermita, actualmente solo se conserva uno de los pozos a modo de decoración.
Se celebran romerías el día 11 de Junio por San Benet y el 13 de Diciembre para Santa Lucía, siendo esta ultima tal vez la más popular y la que más fieles congrega, pese al frío que hace en invierno, ya que son muchos los que pasan el fin de semana en la ermita durmiendo en sacos a la intemperie. Antiguamente cuando el apeadero estaba en funcionamiento, la gente llegaba en tren y subía a pie la montaña para celebrar la romería.
Estas son las historias de la ermita de Santa Lucía, cada uno que se quede con la que más le agrade. A mi me gusta le versión que contaban los pescadores, tal vez por que es la que siempre he oído y es con la que me quedo… ¿leyenda? posiblemente ese sea el encanto de los pueblos.
¿Cuál es el origen de la ermita de Santa Lucía?
Cuenta la leyenda que un día de tormenta unos pescadores faenaban en alta mar, cuando les sorprendió una gran tempestad. Al verse en peligro y ante el temor de no poder soportar dicho temporal, rezaron a la Virgen haciéndole la promesa de que si los salvaba del naufragio y de morir ahogados, pudiendo volver sanos y salvos a casa, construirían una ermita para venerarla y dar las gracias por haber vuelto a nacer.
Buscarían el punto más alto de la costa, para que todo el mundo desde mar o tierra pudiese contemplar la ermita y poder visitarla. Después varias semanas buscando el lugar perfecto y merecedor de dicha construcción, el sitio elegido fue la montaña de San Benet a 312 m. sobre el nivel del mar, en Alcossebre.
Esta es la versión que cuentan los vecinos de Alcossebre sobre la ermita de Santa Lucía y que generación tras generación ha ido contándose de padres a hijos, de abuelos a nietos llegando así a nuestros días y que seguimos escuchando embobados en boca de ellos cada vez que nos la cuentan nuestros abuelos mientras estamos sentados en su regazo, para mi es la que vale ya que es la que siempre he oído contar y me quedo con ella…
Datos oficiales
La ermita de Santa Lucía, situada en la parte más meridional de la Sierra de Irta, es de estilo barroco valenciano y data de finales del siglo XVII. Una nave simple de vuelta de cañón y contrafuertes forman su estructura.
Posee una estructura semicircular adosada a la pared posterior de la ermita, de cuerpo cilíndrico y base de mampostería, cuyo funcionamiento puede datar de los siglos XV-XVI. El hecho que desde la cima se pueda ver el Prat de Cabanes, las islas Columbretes, el desierto de las Palmas, las Agujas de Santa Agueda y en contadas ocasiones si el clima lo permite podemos ver a lo lejos el Cabo de San Antonio, en Alicante, nos hace pensar que hubo una torre de vigía.
También podemos encontrar adosado un antiguo edificio que pudo ser un hostal con habitaciones para los peregrinos que llegaban de distintos puntos de la geografía para venerar a la virgen, establos para las caballerías y dos pozos en la plaza que abastecían de agua a la ermita, actualmente solo se conserva uno de los pozos a modo de decoración.
Se celebran romerías el día 11 de Junio por San Benet y el 13 de Diciembre para Santa Lucía, siendo esta ultima tal vez la más popular y la que más fieles congrega, pese al frío que hace en invierno, ya que son muchos los que pasan el fin de semana en la ermita durmiendo en sacos a la intemperie. Antiguamente cuando el apeadero estaba en funcionamiento, la gente llegaba en tren y subía a pie la montaña para celebrar la romería.
Estas son las historias de la ermita de Santa Lucía, cada uno que se quede con la que más le agrade. A mi me gusta le versión que contaban los pescadores, tal vez por que es la que siempre he oído y es con la que me quedo… ¿leyenda? posiblemente ese sea el encanto de los pueblos.
ERMITA DE SAN ANTONIO
Después de cruzar el río San Miguel llegamos a la ermita de San Antonio, está a las afueras del pueblo, cerca de la discoteca Túnel que antiguamente eran los almacenes portuarios.
Cuenta la historia que fue aquí en este lugar donde en 1690 un cura de Alcalà de Xivert, Bartolomé Conesa, encontró una imagen de San Antonio de Padua. Fueron las olas del mar las que la sacaron a la playa, se desconoce el origen del por qué estaba en el mar. Por iniciativa del presbítero Gabriel Ebrí y para honrar al que sería patrón de la villa se construyó en 1773 esta ermita, quien cedió los terrenos de su propiedad y corrió con los gastos. Fue bendecida el 19 de enero de 1774
A la ermita se accede por un camino que actualmente ha sido arreglado, ambos lados lo adornan cipreses hasta llegar a una especie de porche delantero abierto. Es un edificio sencillo y humilde pero muy querido por los vecinos de la zona. Tiene unas dimensiones de 9,70 m de largo por 4,60 m de ancho y aproximadamente unos 6 metros de alto. Su fachada está coronada por una pequeña torre con campana. La puerta es de madera y en la parte frontal superior se abre un óculo redondo.
El interior es sencillo, de una sola nave con bóveda de cañón apoyada en arcos de medio punto. Antiguamente el piso era ajedrezado, tras la reforma se cambió. Posee zócalo en las paredes y adornos de rocalla de gusto rococó. El presbiterio, comunicado con la pequeña sacristía, tiene planta octogonal y está presidido por talla dieciochesca del titular en una hornacina. Junto al altar, revestido de cerámica, hay una imagen de la Sagrada Familia en una especie de retablo de madera.
Actualmente se encuentra en buen estado ya que ha sido restaurada tras los daños que sufrió durante la guerra y mantiene culto regular, especialmente en verano. Su día grande es el domingo siguiente al 25 de julio, festividad de Sant Jaume. En esa jornada se celebra procesión por los alrededores y numerosos actos populares. También es tradicional honrar al santo en el aniversario de la bendición de su ermita, 19 de enero.
TORRE CAMPANARIO DE ALCALÁ DE XIVERT
Visible desde cualquier punto de Alcalá e incluso antes de llegar a la población, el campanario destaca por su esbeltez y gran altura, formando junto con la iglesia y su fachada un conjunto monumental de época barroca emblemático en las tierras del norte de Castellón.
Símbolo del pueblo, cargado de leyendas, anécdotas y avatares que subyacen en la memoria popular representa la historia viva de los habitantes de Alcalá.
Tradicionalmente visitado, acceder por su escalera sin alma hasta el campanil es un ejercicio que vale la pena. Cuando alcanzamos el remate nos embarga una peculiar sensación, al observar las espectaculares vistas del corredor de Alcalá así como el precioso juego de campanas que con sus toques sigue marcando el ritmo de la vida desde que se finalizó su obra el 14 de Junio de 1803.
En 1783, diecisiete años después de consagrado el templo, se inician las obras de la torre, con diseño y dirección de Juan Barceló. Una inscripción situada en el lado anterior del campanario menciona que: "SE PRINCIPIO ESTA OBRA EL 15 DE AGOSTO DE 1784 Y SE TERMINO EL 14 DE JUNIO DE 1803"
Tras el fallecimiento de Barceló, la obra fue rematada Blas Teruel, al que se debe la parte superior del campanil. Lo cierto es que Barceló no pudo terminar la obra, que se rematé retóricamente con un gran ángel de madera situado en la cúspide, escultura que fue destruida por un relámpago el 25 de noviembre de 1886. La estatua actual que la sustituye representa a San Juan Bautista, titular del templo, y también es de madera, tallada en 1901 por el artesano local Juan Bosch. El 28 de octubre del mismo ano, ante los incrédulos ojos del pueblo, fue izada a su actual emplazamiento por el gimnasta José Puertollano.
El actual juego de campanas fue construido en su mayoría en 1995 por el fundidor Paccard, conservándose la más antigua de 1869, de mayor peso y diámetro, conocida como la del Sacramento de las Horas.
Actualmente el campanario está declarado Monumento Histórico Artístico Nacional, junto con la parroquial de San Juan Bautista.
La torre tiene una planta octogonal de 27 metros de perímetro, alcanzando una altura de 68, lo que la convierte en una de las más altas de la Comunidad Valenciana. Su forma prismática se refuerza con contrafuertes en los ángulos, dividiéndose horizontalmente en cuatro cuerpos mediante cordones pétreos. El Último cuerpo, el de campanas, sustituye los contrafuertes por ocho columnas semiempotradas de orden compuesto situadas diagonalmente, esto es, todo el orden girando 450, siendo las aristas vivas del pedestal y entablamento continuación de las de los contrafuertes. El efecto se completa con las efectistas dobles volutas del capitel. Entre aquellas se abren ocho vanos, alargados y con arcos de medio punto, en los que se alojan las campanas. Tangentes a sus claves, se sitúan otros tantos medallones ovales que interrumpen el arquitrabe del orden y deforman el friso y la cornisa. El situado en la cara anterior del campanario, la del reloj, es más grande que el resto produciendo, lógicamente, una mayor deformación en el entablamento, lo que da a la torre una cierta direccionalidad.
El cuerpo de campanas se corona con una potente balaustrada de perímetro circular con pedestales en las verticales de las semicolumnas, bolas historiadas sobre ellos y, a sus pies, gárgolas en forma de cañones.
El remate, o campanil, se compone de dos cuerpos octogonales superpuestos con ventanas de medio punto y semicolumnas en los ángulos: corintias las del superior e indeterminadas las del inferior Esta estructura se asegura, estática y estéticamente, mediante ocho arbotantes de arco tendido con su trasdós tallado en forma de complicada voluta, quizá uno de los elementos más característicos de esta sorprendente torre.
El campanario de Alcalá de Xivert se incluye claramente en la vieja tradición de las grandes torres octogonales del gótico catalán (Catedral de Lérida, Valencia, etc.) que el barroco nunca llegó a abandonar como lo demuestra el campanario de la antigua parroquial de Ruzata (hoy San Valero). Sin embargo, a partir del cuerpo de campanas, Barceló se inspira más en la torre hexagonal de Santa Catalina, levantada entre 1688 y 1 705 por Juan Bautista Viñes.
CASTILLO DE ALCALÁ DE XIVERT
“Emplazado en lo alto de la sierra de Irta, en un enclave desde el cual domina el llano y el mar. Ha constituido un asentamiento para diferentes grupos humanos, al menos, desde el s. XIV-XIII a.C. hasta principios del s. XVII de nuestra era.
La estructuración, funcionalidad y carácter del asentamiento ha sido diferente dependiendo del momento histórico. Conserva dos partes bien diferenciadas: la árabe y la cristiana. Este castillo fue cedido por Alfonso II a la Orden del Temple, pasando después a la Orden de Montesa y siendo finalmente abandonado en el s. XVIII.
La primera ocupación del lugar constatada fue de la Edad de Bronce (siglos XIV-XIII a.C.). La ocupación ibérica desde el siglo VI al IV a.C., probándose arqueológicamente cuatro fases de ocupación sucesivas. Por otra parte la aparición de cerámicas ibéricas con decoraciones avanzadas y algunos fragmentos de origen itálico (que evidencian contactos con la civilización romana), obligan a pensar en una ocupación todavía en el siglo II a.C.
En el año 1234, después de varias y confusas donaciones por parte de los monarcas cristianos a sus seguidores, cuando Xivert estaba todavía bajo el dominio musulmán, pasó el castillo y el poblado, por un pacto de rendición pacífica, a manos de la Orden del Temple. El referido pacto es la primera fuente escrita extensa referida a Xivert. Aquí, aparte de numerosas cláusulas de tipo jurídico, se especifica claramente la división del conjunto conquistado.
Los sarracenos permanecieron viviendo en el poblado y los cristianos ocuparon el castro y el albacar contiguos. Gracias a la descripción de la separación y los límites de los dos dominios se deja una constancia, del aljibe, la mezquita mayor y el albacar, entre otros, y su relación espacial. Los templarios otorgaron carta de población en el año 1251. A la extinción de la Orden del Temple pasaría a propiedad de la Orden de Montesa, igual que ocurrió con la mayoría de las posesiones del Temple en la región.
A principios el siglo XVI, durante las Germanías fue ocupada por las tropas mandadas por Estellés, y el castillo y la villa serían incendiados en el 1521. En el año 1547, la población sufriría un importante ataque pirata que conseguiría rechazar. En el año 1592 se incorporaría a la corona, pero la población musulmana seguiría viviendo en Xivert hasta el año 1609. Posteriormente, en el año 1616, el castillo sería poblado por cristianos, para se abandonado definitivamente en el año 1632.
En la primera guerra carlista fueron muchos los hechos cruentos acaecidos en la región, al convertirse en escenario importante del desarrollo del conflicto. La población y el castillo fueron ocupados por las fuerzas carlistas. El castillo de Xivert se encuentra en las estribaciones de la Sierra de Irta, a unos cuatro kilómetros de la actual población. Se alza sobre un monte que ha constituido un asentamiento para grupos humanos, al menos entre el siglo XIV-XIII a.C. Hasta principios del XVII de nuestra era.
La fortaleza islámica (siglo X hasta mediados del siglo XIII) se encuentra en buen estado de conservación aunque la remodelación del recinto superior en época cristiana nos impide conocer detalles de a distribución original. Consta de una línea defensiva exterior que envuelve y protege la alcazaba o alcázar, zona más elevada del conjunto, que está a su vez protegido por murallas y bastiones. La ocupación en planta del conjunto es de unos 8.000 m2.
Entre ambas estructuras queda un espacio libre, el albacar, reservado para usos auxiliares de acogida de tropas o ganado. La llegada de los cristianos en Xivert, obliga a los residentes a abandonar este espacio y trasladarse a un nuevo poblado morisco. El castillo cristiano (siglos XII al XVII) se caracteriza por reaprovechar la disposición general del castillo islámico, mientras se varía por completo la organización de los espacios internos. De esta época cabe destacar la imponentes obras de sillería, realizadas bajo el dominio de la Orden del Temple: las torres circulares gemelas y el aljibe de la plaza de armas con bóveda de medio punto con unas medidas de 10,65 x 5,20 (medidas interiores) y 3,50 metros de altura. Estas obras fueron ejecutadas en sillería de una gran calidad. (C.Pérez-Olagüe)”.
OTRAS VISITAS DE INTERÉS
PEÑÍSCOLA
Peñíscola es un destino que atrapa por su historia, por su gastronomía y por su naturaleza. Esta ciudad cuenta con diferentes ambientes para disfrutar del mar, de la montaña y, también, de grandes monumentos de su pasado. Prepárate para dar un paseo por su casco histórico y para bañarte en algunas de sus calas más paradisíacas.
Qué ver en Peñíscola
Una buena forma de empezar a conocer Peñíscola es recorriendo de arriba abajo todo su casco antiguo. Algunas de sus casas y muchos de sus monumentos conservan el gran legado que dejó el Papa Luna en esta ciudad.
El Conjunto histórico-artístico de Peñíscola posee grandes joyas de la Comunitat Valenciana. Entre ellas destaca el Castillo del Papa Luna, una gran fortaleza ubicada sobre una península rocosa en la costa. Con tan solo cruzar sus muros podrás viajar en el tiempo y conocer los grandes tesoros que todavía se conservan en su interior. Además, podrás disfrutar de unas magníficas vistas del Mediterráneo. Y qué decir del Bufador, un rincón lleno de magia que te sorprenderá por sus saltos de agua en los días de temporal.
¡Perderse por su casco antiguo es toda una aventura! Camina por sus estrechas callejuelas empinadas y disfruta de las vistas. Sus casas blancas te sorprenderán, aunque hay una en especial que querrás inmortalizar. Hablamos de la Casa de las Conchas, con una peculiar fachada que te fascinará.
Peñíscola es, también, toda una ciudad de cine. Aquí se han rodado algunas películas y series muy famosas internacionalmente, como Juego de Tronos, y otras nacionales. Prepárate para conocer los escenarios de grandes obras cinematográficas.
Este precioso rincón de la provincia de Castellón tiene un gran complemento, su naturaleza. Sus extensas playas, como la Playa del Nord, y las acogedoras calas de la costa sur se funden con el abrigo de la imponente Sierra de Irta. Una forma ideal de conocer esta última es adentrarse en sus rutas senderistas, en las que, incluso, podrás encontrar monumentos históricos como la Torre de Badum.
Qué ver en Peñíscola
Una buena forma de empezar a conocer Peñíscola es recorriendo de arriba abajo todo su casco antiguo. Algunas de sus casas y muchos de sus monumentos conservan el gran legado que dejó el Papa Luna en esta ciudad.
El Conjunto histórico-artístico de Peñíscola posee grandes joyas de la Comunitat Valenciana. Entre ellas destaca el Castillo del Papa Luna, una gran fortaleza ubicada sobre una península rocosa en la costa. Con tan solo cruzar sus muros podrás viajar en el tiempo y conocer los grandes tesoros que todavía se conservan en su interior. Además, podrás disfrutar de unas magníficas vistas del Mediterráneo. Y qué decir del Bufador, un rincón lleno de magia que te sorprenderá por sus saltos de agua en los días de temporal.
¡Perderse por su casco antiguo es toda una aventura! Camina por sus estrechas callejuelas empinadas y disfruta de las vistas. Sus casas blancas te sorprenderán, aunque hay una en especial que querrás inmortalizar. Hablamos de la Casa de las Conchas, con una peculiar fachada que te fascinará.
Peñíscola es, también, toda una ciudad de cine. Aquí se han rodado algunas películas y series muy famosas internacionalmente, como Juego de Tronos, y otras nacionales. Prepárate para conocer los escenarios de grandes obras cinematográficas.
Este precioso rincón de la provincia de Castellón tiene un gran complemento, su naturaleza. Sus extensas playas, como la Playa del Nord, y las acogedoras calas de la costa sur se funden con el abrigo de la imponente Sierra de Irta. Una forma ideal de conocer esta última es adentrarse en sus rutas senderistas, en las que, incluso, podrás encontrar monumentos históricos como la Torre de Badum.
MORELLA
Situada en el extremo norte de la Comunidad Valenciana y a sólo 60 kilómetros de la costa, Morella aparece en los ojos del visitante envuelta del encanto que le transmiten la posición estratégica, que llena el paisaje, y las murallas centenarias coronadas por el robusto castillo a más de mil metros de altura.
Pocas poblaciones presentan un patrimonio tan rico en historia, arqueología, arte, fiestas, cocina y naturaleza. Morella y sus alrededores ofrecen todo un mundo propio donde tradición y modernidad conviven en armonía.
Morella ha sido testigo clave de los principales acontecimientos históricos en el transcurso de los siglos. Ciudad de paso, cruce de caminos, entre el Valle del Ebro y el Mediterráneo, enlazando Cataluña, Aragón y Valencia, Morella a presenciado episodios de todas las civilizaciones que aquí han habitado. Desde la Prehistoria, tiempos del Neolítico, de la Edad del Bronce, íberos, romanos, musulmanes, judíos, cristianos… todos vieron en este lugar una fortaleza inexpugnable. La forma caprichosa de la ciudad, su castillo y murallas han sido escenario del paso de figuras como Rodrigo Díaz de Vivar, El Cid Campeador, que libró dos batallas en este comarca al servicio del rey musulmán de Zaragoza en el siglo XI.
SAN MATEU
Pocas poblaciones presentan un patrimonio tan rico en historia, arqueología, arte, fiestas, cocina y naturaleza. Morella y sus alrededores ofrecen todo un mundo propio donde tradición y modernidad conviven en armonía.
Morella ha sido testigo clave de los principales acontecimientos históricos en el transcurso de los siglos. Ciudad de paso, cruce de caminos, entre el Valle del Ebro y el Mediterráneo, enlazando Cataluña, Aragón y Valencia, Morella a presenciado episodios de todas las civilizaciones que aquí han habitado. Desde la Prehistoria, tiempos del Neolítico, de la Edad del Bronce, íberos, romanos, musulmanes, judíos, cristianos… todos vieron en este lugar una fortaleza inexpugnable. La forma caprichosa de la ciudad, su castillo y murallas han sido escenario del paso de figuras como Rodrigo Díaz de Vivar, El Cid Campeador, que libró dos batallas en este comarca al servicio del rey musulmán de Zaragoza en el siglo XI.
SAN MATEU
Para empezar en Sant Mateu tienes que recorrer su casco histórico, una rica colección de edificios, rincones y estructuras en su mayor parte de origen medieval, y que incluye joyas como su horno medieval, el Palacio Borrull, el Callejón de los Judíos, el Palacio de la Cort Nova, Plaza Mayor y Fuente del Ángel.
Mención especial merece su Iglesia Arciprestal, en la que podremos ver una interesante colección de orfebrería medieval y una magnífica torre campanario octogonal. Deberás encontrar también los restos de sus murallas del siglo XIV, y visitar “Les Presons”, unas mazmorras medievales.
Aún nos quedará por citar en Sant Mateu el campanario de les Llàstimes o la Iglesia y Convento de las Monjas, así como la Iglesia de San Pedro, que ha ido modificándose sobre una construcción original del siglo XIII. La Torre Cantacorbs es una de las antiguas puertas de la ciudad amurallada y el Palacio de Villores, con fachada renacentista sobre un edificio medieval.
Desde Sant Mateu puedes iniciar bonitas rutas senderistas como las que te llevan a la Ermita de la Mare de Déu dels Àngels, la Ermita de Sant Cristòfol y el Molí Vell, sin olvidar el bonito paisaje que disfrutarás en el Racó del Frare.
Comer en Sant Mateu es otro gran placer, con dulces de almendras cuya receta ha cambiado muy poco desde el medievo como final delicioso de comidas regadas con un magnífico aceite de oliva. Olleta de Sant Mateu, carnes y embutidos, arroces y sabrosos quesos nunca faltan en una escapada a este municipio.
Última edición: