"Tuvo doce hijos y 27 años después de casarse se separó del padre de las criaturas, que no era ningún santo. No le quedó más remedio que ponerse a trabajar. Hizo de todo para sacar adelante a su prole. Fregó y cocinó en restaurantes, recogió fresas cuando era la campaña, y estuvo bastante tiempo en casa de una familia."
Mis respetos y admiración a esta señora, madre mía, demuestra de lo que es capaz una mujer, en aquella época no era tan fácil y "bonito" separase del marido, para mi esta es una autentica feminista y no lo que hay ahora.