Interesante tema.
Es curioso, pero los hoteles y los campings, si que se revisan. Lo que pasa es que aunque se revisen, tampoco se puede hacer gran cosa en el sentido que tu dices.
Y me explico. La categoría de un hotel se obtiene cumpliendo unos determinados parámetros que son objetivos, medibles, como por ejemplo, la superficie mínima de cada habitación (x m² para x estrellas) y una serie de comodidades, como por ejemplo, tener aire acondicionado, calefacción o televisión en la habitación. Si se cumplen esas condiciones se obtiene la categoría. ¿Que puede ocurrir? Que lleges y te encuentres con una TV de tubo, pero que funciona perfectamente. ¿Esta anticuada la TV? Si, pero si funciona, no hay motivo OBJETIVO para que la inspección le diga nada al hotelero. Y eso pasa con todo: la decoración, los sanitarios, etc...Algo similar ocurre con los campings: si la superficie de la parcela y los servicios que deben prestarse se siguen prestando, la categoría OBJETIVAMENTE se mantiene.
Eso no significa que el camping (o el hotel, pero lo mismo el bar, el restaurante, el concesionario de coches o la consulta del dentista, si nos ponemos en ese plan) no pueda estar anticuado en sus instalaciones, cosa que ocurre frecuentemente.
Distinto es el caso de la falta de limpieza o de la falta de mantenimiento, que puede ser puntual (unos momentos concretos, unos días concretos, una determinada temporada) o generalizada, que ya estaríamos en otro caso. La inspección puede apreciar esa circunstancia y advertir al establecimiento. Lo que no pueden es obligar a reformar un módulo de sanitarios que está limpio, funciona correctamente, pero es más "vintage" que el salón de los Alcántara...
Los precios, en cambio, son libres. Por eso hay hoteles con dos o tres estrellas que son más caros que algunos de cuatro y cinco. Y por eso hay hoteles de cinco estrella a menos de 100 euros la noche y otros que no bajan de los 600... O campings de primera categoría que admiten ASCI y de tercera que no.
Esto que hace una década podía ser un problema hoy no lo es, gracias a los Booking,TripAdvisor, foros, etc... donde se pueden ver fotos y comentarios reales y saber las cosas que el hotel o el camping no dice pero que determinados clientes valoran (ej. puedes estar a 100 metros de la playa, en primera línea y decirlo en tu publicidad, destacando unas maravillasas vistas, pero siendo cierto, tus clientes dirán que tienes que bajar 2000 escalones o hacer 3 km en coche para llegar al agua). Pero también es cierto que todos esos comentarios hay que "filtrarlos" y saberlos leer, descartando las pataletas de muchos clientes (cosa que se nota sin mucha dificultad), las críticas "autoescritas" a mayor gloría del establecimiento, los comentarios de la prima de la recepcionista albando la simpatía de la chica del turno de tarde, o los de la competencia o el empleado despechado, etc... y sabernos quedar con lo que de verdad nos interesa.