Cocodrilo feliz
hablador
En Galicia estamos pasando la mayor sequía de los últimos años. Desde agosto no llueve. Los montes están resecos y tirar una colilla supone un riesgo elevado. El año pasado por estas fechas estábamos haciendo recuento de hectáreas arrasadas por los incendios, casi todos intencionados. Algunos campistas habían sido desalojados preventivamente, ante el posible avance del fuego. Y, curiosamente, este año que la sequía es colosal (adjetivo que le encanta a mi paisano Rajoy) los incendios, que existieron, no fueron ni tantos, ni tan estratégicamente repartidos. No he visto en los medios informativos ninguna estadística de hectáreas arrasadas. Sin embargo, incendios hubo. Tampoco he visto que ninguno de los medios informativos destacase esta notable y satisfactoria diferencia; tampoco los políticos que el año pasado se desgañitaban culpando de inexperiencia a los nuevos inquilinos de la Xunta, se han ocupado para nada de si se quemaron mil, diez mil o treinta mil hectáreas. ¡Qué raro!
Y volviendo a mi paisano Rajoy, echo de menos alguna foto suya con una manguera de jardín apagando un incendio…
Por eso, hoy, estoy contento de que se pueda decir aquello de “Galicia calidade”.
Cordiales saludos.-
Y volviendo a mi paisano Rajoy, echo de menos alguna foto suya con una manguera de jardín apagando un incendio…
Por eso, hoy, estoy contento de que se pueda decir aquello de “Galicia calidade”.
Cordiales saludos.-