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Tenerife. Los campistas de la Isla, y de cara a la Semana Santa, piden que se les deje de "perseguir", que "la Guardia Civil y las administraciones nos dejen tranquilos, pues no sólo no se crean zonas para acampar en el litoral, sino que se nos va quitando lo poco que tenemos. Nos van echando de todos los sitios y se agrava la situación". El presidente de la Plataforma Pro Derechos de los Campistas, José Antonio Pérez, además, señala que "siempre ha existido el compromiso del Cabildo de dotar a Tenerife de varias zonas de acampada en el litoral, y lo único que se ha hecho es abrir un camping en Montaña Roja (Granadilla), cuyos precios abusivos lo han llevado a su cierre, pues a una familia le salía prácticamente lo mismo quedarse en un hotel en el Sur que esa zona de acampada".
Precisamente, en el avance del Plan Territorial Especial de Ordenación de Campamentos de Turismo, el Cabildo señalaba hace más de 5 años, que "se establecerán las medidas operativas necesarias para conformar una oferta insular de campamentos de turismo que permita reconducir el ejercicio incontrolado de la actividad de acampada. Entre tales medidas se incluirán propuestas de mecanismos de gestión y de colaboración entre los promotores y la administración pública". En dicho documento, con datos de 1998 y 1997, se hablaba de unas 16 zonas posibles de acampada. En el plan se informaba de la gran demanda de este sector, pues se habían detectado más de 300 puntos en la costa en los que se practicaba esta actividad "sin contar con las infraestructuras y servicios mínimos necesarios para acoger la ingente cantidad de usuarios que se dispersan por todo el litoral".
El avance del Plan de Campamentos Turísticos del Cabildo reconocía que se trata de una actividad en auge, habida cuenta del alto porcentaje de personas que acampan en el litoral, "sin que hasta la fecha haya existido una respuesta adecuada a este tipo de usos. La acampada no ha sido ni mucho menos una actividad ordenada".
Persecución. Sin embargo, y tal como lo señalan los campistas de la Isla, "han pasado los años y no se ha hecho nada, y lo pero de todo es que cada vez estamos más perseguidos por la policía". "Son muchas las familias y las personas (unas 14.000) que optan por esta forma de ocupar su ocio, que fomenta el contacto con la naturaleza de nuestros hijos, de nuestros jóvenes, pero parece que a las administraciones lo único que les interesa son el turismo y el hormigón", indica José Antonio Pérez.
Pero, por su parte, el consejero de Medio Ambiente del Cabildo, Wladimiro Rodríguez, ha señalado en varias ocasiones que el Cabildo no creará más zonas de acampada en el litoral, "pues hemos tenido que cerrar la de Montaña Roja, en Granadilla, porque no iba nadie. La empresa que lo gestionaba sólo tenía pérdidas. Ahora estamos a la espera de que se presente un nuevo gestor, e incluso se están manteniendo conversaciones con el Ayuntamiento del municipio. Teníamos este camping con todos los servicios necesarios, que costó mucho abrirlo, y no era utilizado por los campistas. Éstos seguían acudiendo a zonas en las que no estaba permitido acampar".
Los campistas reiteran que "en dicha zona de acampada se exigían precios abusivos. Una familia tenía que pagar unos 30 euros por día, y eso no tiene sentido". El presidente de la Plataforma Pro Derecho de los Campistas dice que "lo único que pedimos es que por lo menos durante cuatro veces al año, Semana Santa, Navidad, algún puente y en verano se habiliten algunas zonas con control de la administración". "Pedimos lo mismo que se hace cuando se organiza un concierto en la playa, por ejemplo, donde se ponen baños, papeleras.... Sólo se trata de facilitar el contacto con la naturaleza y el mar a nuestros hijos, a los ciudadanos de la Isla que no pueden permitirse otro tipo de vacaciones, y a aquellos que aman esta actividad, sin necesidad de que desde la administración se tengan que invertir grandes cantidades de dinero", añade José Antonio Pérez.
Éste aprovecha para señalar "lo cuantiosas que son las multas por acampar en el litoral". "Y no nos pueden decir que acampemos en las áreas ubicadas en los montes, pues el peligro de incendios en el verano sería inmenso. Es necesario buscar una solución, algo que llevamos pidiendo yo no sé ni cuantos años hace ya", concluye.
fuente: http://www.laopinion.es/
Precisamente, en el avance del Plan Territorial Especial de Ordenación de Campamentos de Turismo, el Cabildo señalaba hace más de 5 años, que "se establecerán las medidas operativas necesarias para conformar una oferta insular de campamentos de turismo que permita reconducir el ejercicio incontrolado de la actividad de acampada. Entre tales medidas se incluirán propuestas de mecanismos de gestión y de colaboración entre los promotores y la administración pública". En dicho documento, con datos de 1998 y 1997, se hablaba de unas 16 zonas posibles de acampada. En el plan se informaba de la gran demanda de este sector, pues se habían detectado más de 300 puntos en la costa en los que se practicaba esta actividad "sin contar con las infraestructuras y servicios mínimos necesarios para acoger la ingente cantidad de usuarios que se dispersan por todo el litoral".
El avance del Plan de Campamentos Turísticos del Cabildo reconocía que se trata de una actividad en auge, habida cuenta del alto porcentaje de personas que acampan en el litoral, "sin que hasta la fecha haya existido una respuesta adecuada a este tipo de usos. La acampada no ha sido ni mucho menos una actividad ordenada".
Persecución. Sin embargo, y tal como lo señalan los campistas de la Isla, "han pasado los años y no se ha hecho nada, y lo pero de todo es que cada vez estamos más perseguidos por la policía". "Son muchas las familias y las personas (unas 14.000) que optan por esta forma de ocupar su ocio, que fomenta el contacto con la naturaleza de nuestros hijos, de nuestros jóvenes, pero parece que a las administraciones lo único que les interesa son el turismo y el hormigón", indica José Antonio Pérez.
Pero, por su parte, el consejero de Medio Ambiente del Cabildo, Wladimiro Rodríguez, ha señalado en varias ocasiones que el Cabildo no creará más zonas de acampada en el litoral, "pues hemos tenido que cerrar la de Montaña Roja, en Granadilla, porque no iba nadie. La empresa que lo gestionaba sólo tenía pérdidas. Ahora estamos a la espera de que se presente un nuevo gestor, e incluso se están manteniendo conversaciones con el Ayuntamiento del municipio. Teníamos este camping con todos los servicios necesarios, que costó mucho abrirlo, y no era utilizado por los campistas. Éstos seguían acudiendo a zonas en las que no estaba permitido acampar".
Los campistas reiteran que "en dicha zona de acampada se exigían precios abusivos. Una familia tenía que pagar unos 30 euros por día, y eso no tiene sentido". El presidente de la Plataforma Pro Derecho de los Campistas dice que "lo único que pedimos es que por lo menos durante cuatro veces al año, Semana Santa, Navidad, algún puente y en verano se habiliten algunas zonas con control de la administración". "Pedimos lo mismo que se hace cuando se organiza un concierto en la playa, por ejemplo, donde se ponen baños, papeleras.... Sólo se trata de facilitar el contacto con la naturaleza y el mar a nuestros hijos, a los ciudadanos de la Isla que no pueden permitirse otro tipo de vacaciones, y a aquellos que aman esta actividad, sin necesidad de que desde la administración se tengan que invertir grandes cantidades de dinero", añade José Antonio Pérez.
Éste aprovecha para señalar "lo cuantiosas que son las multas por acampar en el litoral". "Y no nos pueden decir que acampemos en las áreas ubicadas en los montes, pues el peligro de incendios en el verano sería inmenso. Es necesario buscar una solución, algo que llevamos pidiendo yo no sé ni cuantos años hace ya", concluye.
fuente: http://www.laopinion.es/