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La imagen del tradicional campista alemán que todos los años visita las costas castellonenses, cargado de maletas, mesas plegables y toneladas de crema solar, está desapareciendo. Esta es la conclusión a la que han llegado los empresarios del mundo del camping después de analizar las previsiones y los resultados del sector en los últimos meses . "Últimamente hemos notado una bajada de clientes extranjeros que ha venido compensada por un aumento de turistas españoles" argumenta el Presidente de la Federación de Campings en la provincia de Castelló, Fernando Bonet.
Habitualmente, los campings suelen acoger a turistas extranjeros en los meses de invierno. Franceses, alemanes e ingleses acuden al litoral de Castelló atraídos por las suaves temperaturas. Estos turistas solían alargar sus estancias a los meses de verano, pero el aumento de la oferta turística en otros países y la crisis económica han dejado plazas libres que ahora ocupan los turistas locales.
A principios de año, las previsiones económicas apuntaban a que el sector del turismo iba a ser uno de los más afectados por el descenso general del consumo. Otros también apuntaban a que los habituales turistas iban a optar por destinos tradicionalmente más económicos como los campings, por lo que estos tendrían un fuerte aumento en su demanda. Se debe tener en cuenta que la radiografía tradicional de los campings está cambiando mucho, la tradicional tienda de campaña se ha visto sustituida por el bungalow de madera y todo un complejo de servicios y actividades como piscinas, animación y zonas de recreo.
"La ocupación que tenemos este año en la provincia de Castelló ronda el 80% en los bungalows y el 60% en las parcelas" comenta Fernando. "Nosotros a penas hemos notado la crisis, las cifras de ocupación son muy similares a las del año pasado" contesta éste cuando se le pregunta si han notado un aumento de la demanda de plazas. Fernando también afirma que la mayoría de los campings de la provincia de Castelló han mantenido los precios del año anterior.
Desde la Federación Valenciana de Campings insisten en que "los nuevos clientes locales que reciben los campings no son turistas que han renunciado al hotel por la crisis, si no otro tipo de clientes".
En cambio, afirman que la crisis sí que se ha notado mucho en el consumo medio de los clientes ya que "todos los gastos complementarios como souvenirs, comidas en restaurantes, actividades de aventura u otros servicios que ofrecen los campings han sufrido un descenso del 30% más o menos".
La escasa duración de las estancias perjudica al sector hotelero
" La ocupación en Castelló y provincia ha bajado, pero no ha sido tan catastrófica como se preveía" afirma Alexis de Pablo, Director Comercial de la Asociación Provincial de empresarios de Hotelería y Turismo. Los empresarios de Castelló, como muchos otros, han notado un cambio en el comportamiento del turista. "La crisis ha hecho que desaparezcan las vacaciones de un mes o 15 días" comenta Alexis. De esta manera, las estancias en todos los complejos turísticos ya sean hoteles o campings ahora son más cortas y se reserva con menos antelación. Alexis afirma que las estancias cortas no generan tanto beneficio para el sector como las estancias largas, ya que "cada vez que entra y sale un cliente los hoteles tienen que poner en marcha todo un servicio de limpieza y tener siempre disponible personal para registrar las entradas y las salidas". La crisis económica ha provocado que las agencias de viaje deban hacer más promociones para atraer a a los turistas, mientras el gasto medio por cliente decae. A pesar de todo esto, "Castelló tiene un 82% de turismo nacional que es muy fiel a estas tierras: valencianos, madrileños, aragoneses... el turismo internacional en Castelló no supera el 18% porque los accesos son más difíciles" comenta Alexis. Concretamente, las previsiones hablan de un 80% de ocupación en la costa y un 40% en el turismo de interior. "Uno de los elementos positivos de esta crisis es que la gente no ha dejado de buscar la calidad en los hoteles y servicios", explica Alexis, quien se muestra optimista respecto a los resultados de este verano, aunque reconoce que "sí que ha habido un aumento de la demanda en campings y casas rurales
FUENTE: http://www.levante-emv.com/
Habitualmente, los campings suelen acoger a turistas extranjeros en los meses de invierno. Franceses, alemanes e ingleses acuden al litoral de Castelló atraídos por las suaves temperaturas. Estos turistas solían alargar sus estancias a los meses de verano, pero el aumento de la oferta turística en otros países y la crisis económica han dejado plazas libres que ahora ocupan los turistas locales.
A principios de año, las previsiones económicas apuntaban a que el sector del turismo iba a ser uno de los más afectados por el descenso general del consumo. Otros también apuntaban a que los habituales turistas iban a optar por destinos tradicionalmente más económicos como los campings, por lo que estos tendrían un fuerte aumento en su demanda. Se debe tener en cuenta que la radiografía tradicional de los campings está cambiando mucho, la tradicional tienda de campaña se ha visto sustituida por el bungalow de madera y todo un complejo de servicios y actividades como piscinas, animación y zonas de recreo.
"La ocupación que tenemos este año en la provincia de Castelló ronda el 80% en los bungalows y el 60% en las parcelas" comenta Fernando. "Nosotros a penas hemos notado la crisis, las cifras de ocupación son muy similares a las del año pasado" contesta éste cuando se le pregunta si han notado un aumento de la demanda de plazas. Fernando también afirma que la mayoría de los campings de la provincia de Castelló han mantenido los precios del año anterior.
Desde la Federación Valenciana de Campings insisten en que "los nuevos clientes locales que reciben los campings no son turistas que han renunciado al hotel por la crisis, si no otro tipo de clientes".
En cambio, afirman que la crisis sí que se ha notado mucho en el consumo medio de los clientes ya que "todos los gastos complementarios como souvenirs, comidas en restaurantes, actividades de aventura u otros servicios que ofrecen los campings han sufrido un descenso del 30% más o menos".
La escasa duración de las estancias perjudica al sector hotelero
" La ocupación en Castelló y provincia ha bajado, pero no ha sido tan catastrófica como se preveía" afirma Alexis de Pablo, Director Comercial de la Asociación Provincial de empresarios de Hotelería y Turismo. Los empresarios de Castelló, como muchos otros, han notado un cambio en el comportamiento del turista. "La crisis ha hecho que desaparezcan las vacaciones de un mes o 15 días" comenta Alexis. De esta manera, las estancias en todos los complejos turísticos ya sean hoteles o campings ahora son más cortas y se reserva con menos antelación. Alexis afirma que las estancias cortas no generan tanto beneficio para el sector como las estancias largas, ya que "cada vez que entra y sale un cliente los hoteles tienen que poner en marcha todo un servicio de limpieza y tener siempre disponible personal para registrar las entradas y las salidas". La crisis económica ha provocado que las agencias de viaje deban hacer más promociones para atraer a a los turistas, mientras el gasto medio por cliente decae. A pesar de todo esto, "Castelló tiene un 82% de turismo nacional que es muy fiel a estas tierras: valencianos, madrileños, aragoneses... el turismo internacional en Castelló no supera el 18% porque los accesos son más difíciles" comenta Alexis. Concretamente, las previsiones hablan de un 80% de ocupación en la costa y un 40% en el turismo de interior. "Uno de los elementos positivos de esta crisis es que la gente no ha dejado de buscar la calidad en los hoteles y servicios", explica Alexis, quien se muestra optimista respecto a los resultados de este verano, aunque reconoce que "sí que ha habido un aumento de la demanda en campings y casas rurales
FUENTE: http://www.levante-emv.com/