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El verano desigual e impredecible en el que nos encontramos está alterando los planes de los turistas, y eso afecta a los lugares de alojamiento, pero especialmente, por las inclemencias del tiempo, a los cámpings. En Gijón, existen dos opciones para quienes quieran disfrutar de la oferta cultural, paisajística y comercial de la ciudad pero también del placer de la acampada y el contacto con la naturaleza: el cámping de Gijón y el situado en Deva. Desde ambos emplazamientos, que ofrecen alojamiento para unas 2.100 personas, confían en que en esta primera quincena de agosto, con varios eventos festivos, aumente su ocupación.
El cámping de Gijón, situado en el Rinconín, dispone de 82 parcelas, que dan cabida aproximadamente a 600 personas. Según los responsables, este año se ha producido un aumento de campistas respecto a la temporada pasada, debido principalmente "a la mejoría del tiempo". Los fines de semana el cámping suele cubrir todas las plazas, mientras que el resto de días no es necesario colgar el cartel de "completo", aunque nunca faltan veraneantes. Familias o grupos de amigos que vienen de todas partes de la península, especialmente de las provincias limítrofes como León, Galicia y Cantabria.
El balance es diferente en el cámping situado en Deva, a cuatro kilómetros del centro urbano de Gijón. Según Silvia Ladilla, recepcionista de las instalaciones de este cámping, este verano está siendo "mucho más flojo que el año pasado". El motivo, según Ladilla, es antes que el clima, "la crisis que atraviesa la economía de las familias", que parece que obliga a más de uno a replantearse sus vacaciones.
Este descenso de campistas se hace más acusado dado el mayor número de plazas que oferta el cámping de Deva, que tiene capacidad para 1.465 personas, en un total de 432 parcelas. Este cámping dispone de 432 parcelas, además de 20 cabañas de madera, 32 bungalows, un chalet y diversas instalaciones deportivas. Según Ladilla, los campistas son en su mayor parte de zonas como Madrid, Valladolid o Andalucía, aunque también del extranjero, como Francia u Holanda.
fuente: La Voz de Asturias. Noticias de Asturias, Gijón, Oviedo - La Voz de Asturias
El cámping de Gijón, situado en el Rinconín, dispone de 82 parcelas, que dan cabida aproximadamente a 600 personas. Según los responsables, este año se ha producido un aumento de campistas respecto a la temporada pasada, debido principalmente "a la mejoría del tiempo". Los fines de semana el cámping suele cubrir todas las plazas, mientras que el resto de días no es necesario colgar el cartel de "completo", aunque nunca faltan veraneantes. Familias o grupos de amigos que vienen de todas partes de la península, especialmente de las provincias limítrofes como León, Galicia y Cantabria.
El balance es diferente en el cámping situado en Deva, a cuatro kilómetros del centro urbano de Gijón. Según Silvia Ladilla, recepcionista de las instalaciones de este cámping, este verano está siendo "mucho más flojo que el año pasado". El motivo, según Ladilla, es antes que el clima, "la crisis que atraviesa la economía de las familias", que parece que obliga a más de uno a replantearse sus vacaciones.
Este descenso de campistas se hace más acusado dado el mayor número de plazas que oferta el cámping de Deva, que tiene capacidad para 1.465 personas, en un total de 432 parcelas. Este cámping dispone de 432 parcelas, además de 20 cabañas de madera, 32 bungalows, un chalet y diversas instalaciones deportivas. Según Ladilla, los campistas son en su mayor parte de zonas como Madrid, Valladolid o Andalucía, aunque también del extranjero, como Francia u Holanda.
fuente: La Voz de Asturias. Noticias de Asturias, Gijón, Oviedo - La Voz de Asturias