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La falta de campings y la crisis económica que retrae la salida de los campistas fuera de las Islas está desbordando la capacidad de las zonas de acampadas. La Federación Insular de Caravanistas señala que hay sólo 2.100 plazas en Gran Canaria para atender la demanda de 10.000 autocaravanas.
Viajar y pasar las vacaciones en una autocaravana está de moda. Desde sus inicios en los años 50, con la aparición de los primeros modelos de furgonetas medianas, esta actividad se ha extendido por toda Europa, Estados Unidos y Canadá hasta convertirse en un pujante sector industrial y de servicios que compite con fuerza como alternativa a otras formas de ocio y tiempo libre.
Pero esto no ha calado en Gran Canaria. La isla sigue teniendo una asignatura pendiente con este sector, que sin embargo no para de crecer, como lo afirma el presidente de la Federación Insular de Caravanistas, Claudio Pastor, quien vive alarmado por la «miopía o casi ceguera» de los políticos grancanarios, quienes ante las demandas permanentes realizadas por este colectivo «no hacen otra cosa que echar balones fuera o mirar para otro lado, como si la cosa no fuera con ellos».
Según Pastor, Gran Canaria es la isla con el mayor número de autocaravanas y caravanas de todo Canarias, «porque este año se ha alcanzado la cifra de 10.000 vehículos, un número que podría ser mayor si hubiese espacios acondicionados para la práctica del campismo».
Precisamente éste es el gran déficit que presenta la isla, porque solamente dispone de unas 2.100 plazas para acampar distribuidas o repartidas en 14 sitios en su mayor parte por el Sur y zona de cumbre, aunque ninguna de ellas reúne las condiciones, características y servicios propios de un camping, tal y como se los conoce a estos espacios en la Península y resto de países de la Unión Europea.
«Llevamos 30 años esperando que se regule la actividad, que el Cabildo de Gran Canaria y los ayuntamientos implanten instalaciones de este tipo, pero lo único que han hecho ha sido crear zonas de acampadas en el litoral de San Bartolomé de Tirajana, todas en precario y sin casi servicios, lo cual nunca terminaremos de entender, porque el campismo es un negocio, una actividad tan o más rentable que la hotelera, y sin embargo se la sigue despreciando», indica.
Tenerife
Como en todo, siempre surge la comparación con Tenerife, y en esto también la isla picuda camina con ventaja. Tiene tres campings en costa, varios espacios habilitados con servicios y sólo unos 2.000 autocaravanas. «Aquí han hecho los deberes», concluye Pastor.
Un canon de 3 euros
Las 500 plazas habilitadas en San Bartolomé de Tirajana están todas ocupadas y sin hueco hasta septiembre. Para campar en Arguineguín, Llanos de los Militares, Triana, Carpintera, Posito Bea, Tarajalillo y Los Rodeos el Ayuntamiento cobra tres euros diarios, un canon que los campistas consideran ilegal porque se practica sobre terrenos de uso privativo, sin una tarifa o precio público, aprobado por el pleno.
Tráfico les permite usar cualquier vía pública
La regulación del sector de autocaravanas impulsada por la senadora socialista de Cádiz, Ana Chacón, y las instrucciones de la Dirección General de Tráfico están cambiando la visión de esta actividad en España y otro tanto de lo mismo se espera que tendrá que ocurrir en Canarias.
Con fecha 28 de enero de 2008, el director general de Tráfico, Pere Navarro, ha emitido y enviado a todas las unidades de la DGT la instrucción 08/V-74, donde interpreta en un único documento todos aquellos aspectos normativos relacionados con el autocaravanismo.
En ese documento se expresa que «las autocaravanas pueden efectuar la maniobra de parada y estacionamiento en las mismas condiciones y con las mismas limitaciones que cualquier otro vehículo».
Con esta instrucción la DGT permite que las autocaravanas estacionen en cualquier vía pública, ya que no es relevante el hecho de que sus ocupantes se encuentren en el interior del mismo, bastando que la actividad que se desarrolla en su interior no trascienda al exterior con el despliegue de elementos que desborden el perímetro del vehículo. Esto impide a la policía sancionar a las autocaravanas.
fuente: Canarias7. Toda la información de Canarias, en Internet
Viajar y pasar las vacaciones en una autocaravana está de moda. Desde sus inicios en los años 50, con la aparición de los primeros modelos de furgonetas medianas, esta actividad se ha extendido por toda Europa, Estados Unidos y Canadá hasta convertirse en un pujante sector industrial y de servicios que compite con fuerza como alternativa a otras formas de ocio y tiempo libre.
Pero esto no ha calado en Gran Canaria. La isla sigue teniendo una asignatura pendiente con este sector, que sin embargo no para de crecer, como lo afirma el presidente de la Federación Insular de Caravanistas, Claudio Pastor, quien vive alarmado por la «miopía o casi ceguera» de los políticos grancanarios, quienes ante las demandas permanentes realizadas por este colectivo «no hacen otra cosa que echar balones fuera o mirar para otro lado, como si la cosa no fuera con ellos».
Según Pastor, Gran Canaria es la isla con el mayor número de autocaravanas y caravanas de todo Canarias, «porque este año se ha alcanzado la cifra de 10.000 vehículos, un número que podría ser mayor si hubiese espacios acondicionados para la práctica del campismo».
Precisamente éste es el gran déficit que presenta la isla, porque solamente dispone de unas 2.100 plazas para acampar distribuidas o repartidas en 14 sitios en su mayor parte por el Sur y zona de cumbre, aunque ninguna de ellas reúne las condiciones, características y servicios propios de un camping, tal y como se los conoce a estos espacios en la Península y resto de países de la Unión Europea.
«Llevamos 30 años esperando que se regule la actividad, que el Cabildo de Gran Canaria y los ayuntamientos implanten instalaciones de este tipo, pero lo único que han hecho ha sido crear zonas de acampadas en el litoral de San Bartolomé de Tirajana, todas en precario y sin casi servicios, lo cual nunca terminaremos de entender, porque el campismo es un negocio, una actividad tan o más rentable que la hotelera, y sin embargo se la sigue despreciando», indica.
Tenerife
Como en todo, siempre surge la comparación con Tenerife, y en esto también la isla picuda camina con ventaja. Tiene tres campings en costa, varios espacios habilitados con servicios y sólo unos 2.000 autocaravanas. «Aquí han hecho los deberes», concluye Pastor.
Un canon de 3 euros
Las 500 plazas habilitadas en San Bartolomé de Tirajana están todas ocupadas y sin hueco hasta septiembre. Para campar en Arguineguín, Llanos de los Militares, Triana, Carpintera, Posito Bea, Tarajalillo y Los Rodeos el Ayuntamiento cobra tres euros diarios, un canon que los campistas consideran ilegal porque se practica sobre terrenos de uso privativo, sin una tarifa o precio público, aprobado por el pleno.
Tráfico les permite usar cualquier vía pública
La regulación del sector de autocaravanas impulsada por la senadora socialista de Cádiz, Ana Chacón, y las instrucciones de la Dirección General de Tráfico están cambiando la visión de esta actividad en España y otro tanto de lo mismo se espera que tendrá que ocurrir en Canarias.
Con fecha 28 de enero de 2008, el director general de Tráfico, Pere Navarro, ha emitido y enviado a todas las unidades de la DGT la instrucción 08/V-74, donde interpreta en un único documento todos aquellos aspectos normativos relacionados con el autocaravanismo.
En ese documento se expresa que «las autocaravanas pueden efectuar la maniobra de parada y estacionamiento en las mismas condiciones y con las mismas limitaciones que cualquier otro vehículo».
Con esta instrucción la DGT permite que las autocaravanas estacionen en cualquier vía pública, ya que no es relevante el hecho de que sus ocupantes se encuentren en el interior del mismo, bastando que la actividad que se desarrolla en su interior no trascienda al exterior con el despliegue de elementos que desborden el perímetro del vehículo. Esto impide a la policía sancionar a las autocaravanas.
fuente: Canarias7. Toda la información de Canarias, en Internet