Cuando el bidón se coloca en la máquina, se agujerea la boca del mismo y se permite la entrada del agua a la máquina gracias al efecto de la gravedad. Cuando se aprieta el botón, el
d ispensador de agua libera el aire que iniciará la distribución de agua. El agua sustituye el espacio vacío en el bidón, esta es la razón por la cual cuando se usa este tipo de dispensador se forman grandes burbujas de aire dentro del mismo.
Los dispensadores de agua con bidón ofrecen agua en distintas formas: agua fría, agua con gas y agua caliente. Para permitir la distribución de los diferentes tipos de agua los dispensadores están conectados a una toma de electricidad. Sin ésta el dispensador también podría distribuir agua templada.
Para distribuir agua fría, el dispensador está equipado de un depósito refrigerado mediante un gas refrigerante que circula por las tuberías que lo rodean. Una vez se ha acabado toda el agua fría, es necesario esperar a que el depósito se rellene y que el proceso de refrigeración empiece, antes de poder disfrutar de un agua fresca de nuevo. Cuanto mayor sea la capacidad del depósito, mayor será la cantidad de agua fría disponible.
El agua con gas se genera mediante el mismo principio, pero el dispensador también debe disponer de un cartucho de CO2 que permitirá la gasificación del agua. Cuando el usuario actúe sobre el botón, se añadirá el CO2 al agua refrigerada en el depósito correspondiente antes de que esta llegue a su vaso. De este modo, el agua con gas se produce a demanda y no se almacena en un depósito aparte, lo que permite garantizar un agua con la mayor cantidad posible de gas.
Por último, los dispensadores que ofrecen la opción de agua caliente disponen de una resistencia eléctrica parecida a la que se encuentra en los hervidores, y calientan el agua del circuito de distribución en muy pocos segundos. Al igual que el agua con gas, el agua caliente no se almacena para garantizar una temperatura óptima de distribución que varía entre los 70º y los 100º dependiendo del modelo.
d ispensador de agua libera el aire que iniciará la distribución de agua. El agua sustituye el espacio vacío en el bidón, esta es la razón por la cual cuando se usa este tipo de dispensador se forman grandes burbujas de aire dentro del mismo.
Los dispensadores de agua con bidón ofrecen agua en distintas formas: agua fría, agua con gas y agua caliente. Para permitir la distribución de los diferentes tipos de agua los dispensadores están conectados a una toma de electricidad. Sin ésta el dispensador también podría distribuir agua templada.
Para distribuir agua fría, el dispensador está equipado de un depósito refrigerado mediante un gas refrigerante que circula por las tuberías que lo rodean. Una vez se ha acabado toda el agua fría, es necesario esperar a que el depósito se rellene y que el proceso de refrigeración empiece, antes de poder disfrutar de un agua fresca de nuevo. Cuanto mayor sea la capacidad del depósito, mayor será la cantidad de agua fría disponible.
El agua con gas se genera mediante el mismo principio, pero el dispensador también debe disponer de un cartucho de CO2 que permitirá la gasificación del agua. Cuando el usuario actúe sobre el botón, se añadirá el CO2 al agua refrigerada en el depósito correspondiente antes de que esta llegue a su vaso. De este modo, el agua con gas se produce a demanda y no se almacena en un depósito aparte, lo que permite garantizar un agua con la mayor cantidad posible de gas.
Por último, los dispensadores que ofrecen la opción de agua caliente disponen de una resistencia eléctrica parecida a la que se encuentra en los hervidores, y calientan el agua del circuito de distribución en muy pocos segundos. Al igual que el agua con gas, el agua caliente no se almacena para garantizar una temperatura óptima de distribución que varía entre los 70º y los 100º dependiendo del modelo.
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