Yo con mi afán de ser independiente, siempre he preferido el que se pueda montar sin necesidad de ayuda.
Tengo el Fianma f45i y en la anterior caravana tenía el Omnistore 2000, que era el equivalente en esa marca, pero sin manivela.
Prefiero el que tengo ahora, porque no tengo que subirme al escalón para tirar del frontal (el 2000 también tenía su casette de aluminio e iba atornillado al frente de la caravana) y la verdad, a la hora de recogerlo es un minuto escaso. Si me voy del camping, acostumbro a recogerlo, me cuesta menos esto, que asegurarlo con las piquetas. Hasta ahí llega mi vagueza.
Dos veces (en diez años de uso de toldo) he tenido alguna historia cuando no estaba en la caravana. Una vez se voló (no lo había asegurado con vientos) y parecía la vela de un barco sobre el techo de la caravana y la otra vez cuando volvía de un paseo con una tormenta sorpresa, me encontré una bolsa de agua, que casi me lo arranca.
Ahora si me voy o lo recojo o lo aseguro con piquetas en las patas, por supuesto una de ellas más baja que la otra, por si llueve.
Nunca he querido cerrarlo porque me agobia llevar tanto trasto y odio la limpieza de los bajos a la hora de la recogida.
Incluso en invierno, lo uso sin laterales, ni frontal...