Hace unos años sufrimos ese intento de robo en el centro de Valencia. Volvíamos de viaje y llevábamos el TomTom a la vista (parece que esto les indica que podemos llevar equipaje), al parar en un semáforo de la Plaza de Zaragoza al parecer nos clavaron una navaja en la rueda trasera derecha, nos siguieron hasta que paré porque noté que algo no iba bien; mientras yo me bajaba del coche, una pareja de extranjeros del Este (por el acento) se nos acercó por cada lado del coche, mientras uno se ofrecía a ayudarme a cambiar la rueda, mi mujer vio al otro ya metido por la ventanilla echando mano a su bolso que iba en los asientos traseros. Empezamos a gritar y se fueron corriendo. Tuvimos suerte, pero nos costó comprar un neumático nuevo porque nos habían rajado el lateral. Desde entonces, cada vez que paro y me bajo del coche, cierro las puertas con el mando.