kraus
Caminante
El caso es que no era ese el plan. Durante el invierno habíamos hablado de pasar las vacaciones del 2009 en la Alsacia, haciendo senderismo en la cordillera de los Vosgos y en las montañas de Jura. Las ciudades de la Alsacia –Estrasburgo, Colmar, Mulhouse, Metz- ya las conocíamos pero nos picaba la curiosidad los grandes bosques que veíamos. Y con este objetivo empezamos a buscar información.
Sin embargo un día, sin más, Marta me dijo que no le apetecía hacer muchos kilómetros en vacaciones y que prefería volver a Andorra.
- ¿Y eso?
- Tengo ganas de subir al Casamanya y de recorrer el Val de Madriu.
Hace dos años pasamos nuestras vacaciones en Andorra. En aquella ocasión fue cuando subimos el Comapedrosa, cuya ascensión ya os conté en este mismo subforo. Pero también es verdad que las fuerzas de Marta se agotaron cuando nos acercábamos al Val de Madriu. Y que hubo que cortar con las excursiones.
A Marta no se le había borrado la bella estampa del Casamanya desde el Col de Ordino.
- Me gustaría recordarte que es una ascensión, no un paseo por praderas alpinas.
- Quiero subir el Casamanya, fue su respuesta.
Le debía esta subida y, no nos engañemos, para mí ir a Andorra no es, ni mucho menos, un sacrificio.
Ya decidido, había poco que preparar. Mapas (en papel y para GPS), guías y alojamientos ya los teníamos. Tras un repaso a las ventajas e inconvenientes de los campings de Andorra decidimos volver al Borda D’Ansalonga. Solo quedaba esperar algunos meses para que llegara el verano.
Y hubo que esperar unos meses más 2 días pues aunque teníamos prevista la salida para el 20 de Junio, a última hora me pusieron el examen de maniobras del B+E para el 22. Así pues preparamos la caravana durante el fin de semana, el lunes por la mañana hice las maniobras en la JPT y a las 13:30 empezamos oficialmente las vacaciones (la hora oficial de comienzo de nuestras vacaciones es cuando se engancha la caravana al coche).
Viaje tranquilo, con poco tráfico. A las 22:30 paramos para pasar la noche en el camping Gran Sol, en Montferrer, cerca de la Seu d’Urgel. La cena, un paseo con Kraus, y a dormir.
A la mañana siguiente, desayuno y a la carretera de nuevo. Llegamos a Ordino sobre la 10:00 y a las 12:00 teníamos todo preparado para una estancia de casi tres semanas. A primera hora de la tarde un buen paseo para estirar piernas y patas. Esa misma tarde nos cayó la primera tormenta y por la noche a dormir bien arropaditos.
Sin embargo un día, sin más, Marta me dijo que no le apetecía hacer muchos kilómetros en vacaciones y que prefería volver a Andorra.
- ¿Y eso?
- Tengo ganas de subir al Casamanya y de recorrer el Val de Madriu.
Hace dos años pasamos nuestras vacaciones en Andorra. En aquella ocasión fue cuando subimos el Comapedrosa, cuya ascensión ya os conté en este mismo subforo. Pero también es verdad que las fuerzas de Marta se agotaron cuando nos acercábamos al Val de Madriu. Y que hubo que cortar con las excursiones.
A Marta no se le había borrado la bella estampa del Casamanya desde el Col de Ordino.

- Me gustaría recordarte que es una ascensión, no un paseo por praderas alpinas.
- Quiero subir el Casamanya, fue su respuesta.
Le debía esta subida y, no nos engañemos, para mí ir a Andorra no es, ni mucho menos, un sacrificio.
Ya decidido, había poco que preparar. Mapas (en papel y para GPS), guías y alojamientos ya los teníamos. Tras un repaso a las ventajas e inconvenientes de los campings de Andorra decidimos volver al Borda D’Ansalonga. Solo quedaba esperar algunos meses para que llegara el verano.
Y hubo que esperar unos meses más 2 días pues aunque teníamos prevista la salida para el 20 de Junio, a última hora me pusieron el examen de maniobras del B+E para el 22. Así pues preparamos la caravana durante el fin de semana, el lunes por la mañana hice las maniobras en la JPT y a las 13:30 empezamos oficialmente las vacaciones (la hora oficial de comienzo de nuestras vacaciones es cuando se engancha la caravana al coche).
Viaje tranquilo, con poco tráfico. A las 22:30 paramos para pasar la noche en el camping Gran Sol, en Montferrer, cerca de la Seu d’Urgel. La cena, un paseo con Kraus, y a dormir.
A la mañana siguiente, desayuno y a la carretera de nuevo. Llegamos a Ordino sobre la 10:00 y a las 12:00 teníamos todo preparado para una estancia de casi tres semanas. A primera hora de la tarde un buen paseo para estirar piernas y patas. Esa misma tarde nos cayó la primera tormenta y por la noche a dormir bien arropaditos.