Creía...
Nosotros fuimos una navidad al pueblo, nos hablaron del libro, a la vuelta paramos en Cuenca a comprarlo, lo leimos por el camino, y al llegar ya estabamos deseando aplicarlo, el problema fue (y es) que los acuesta mi suegra, y no podíamos dejarle el marrón a ella, por eso lo hicimos en semana santa. Tardó una semana, pero funcionó.
Lo bueno es que en el pueblo de ella había gente que venía a verla adrede y le decías "Está durmiendo" "Pues despiertala para que la veamos..."

y como no lo hacíamos nos ganamos la fama de bordes y "raros" (bueno, es que yo en esas latitudes aún no tenía esa fama...).
Como sería la cosa que una de las ultimas noches, aún de vacaciones y cuando empezó a dormir sin llorar, nos ibamos a cenar al bar, para celebrarlo, entonces vino una de las tías y mi suegra le hizo señas, como diciendo "espera a que se vayan" :idea1: , así que nos quedamos alli, de las 22:00 a las 24:00,
sin cenar, porque sabiamos lo que iba a pasar si nos marchabamos, por fin dijo, "Venga, pues ya vendré otro día..."

, anda que...